El síndrome de congestión pélvica, es un trastorno que sufren más mujeres de las que podemos imaginar y se trata de un trastorno poco diagnosticado, posiblemente por su poco conocimiento y defunción que tiene en el mundo.
El síndrome de congestión pélvica se trata de un problema que puede afectar al 20% de las mujeres de entre 30 y 50 años, a pesar de ser un trastorno muy poco conocido en nuestra sociedad.
Los síntomas que alertan la posibilidad de sufrir el síndrome de congestión pélvica son las reglas abundantes, asi como los dolores menstruales, en general, tienen que ser dolores frecuentes. Estos dos síntomas son, de cierto modo, los que pueden avisar de que se padece este síndrome.
Pero existen también otros factores secundarios que pueden estar relacionados con el síndrome de congestión pélvica; como pueden ser el estreñimiento unido a la congestión abdominal, mantente atento ante estos dos síntomas ya que te pueden avisar de este trastorno.
Este síndrome, se produce por la aparición de varices internas en el útero y en los ovarios. También, el principal factor que puede desencadenar el síndrome de congestión pélvica es el embarazo, ya que durante esta etapa, tanto el útero como los ovarios se someten a una presión mayor de lo normal.
La calidad de vida de las mujeres con síndrome de congestión pélvica puede ser mala. Es conveniente y necesario tratarlo a tiempo, ya que, al margen de la mala calidad de vida que puede llegar a generar, este trastorno también puede ser el origen de hemorroides o varices en las extremidades inferiores.
Se conoce, que las mujeres con padecen dicho trastorno pueden tener coitos dolorosos. Este dolor pélvico tiene que ser tratado y controlado, y de hecho, hoy en día existen distintos tratamientos para combatir los efectos del síndrome de congestión pélvica.