La obesidad ha alcanzado unas cifras de prevalencia tan drásticas que actualmente está considerada como una epidemia. Mientras en el mundo subdesarrollado se mueren de hambre, en el mundo desarrollado nos morimos por obesidad, no sólo por sí misma, sino en mayor grado para todas las enfermedades a las que esta enfermedad predispone: diabetes tipo 2, hipertensión, cánceres y enfermedades cardiovasculares (las enfermedades crónicas de nuestro tiempo). En España el panorama no es mejor: la obesidad, sobre todo la infantil, es alarmante.Las dos causas principales de obesidadson:- Alimentación poco saludable: en los últimos años han aparecido en el mercado toda una serie de productos ricos en grasas animales y azúcares sencillos, que acompañados del desconocimiento de la población del patrón de una dieta equilibrada han hecho de la mala alimentación uno de los principales detonantes de la patología.- Inactividad física: la vida de la sociedad occidental cada vez es más sedentaria. Este hecho es muy preocupante sobre todo cuando se observa el déficit de ejercicio físico de los niños.Por lo tanto, el entorno juega un papel primordial en el desarrollo de la enfermedad, el cual es perfectamente modificable. Y es la infancia un período decisivo para el aprendizaje de hábitos de vida saludables.Para revertir estos malos hábitos surge la Estrategia NAOS, que tiene como objetivo fomentar una alimentación saludable y promover la actividad física como medio para invertir la tendencia a la obesidad, y sus enfermedades adyacentes. Esta estrategia ha sido elaborada por el Ministerio de Sanidad y Consumo, y todo un abanico de expertos sobre el tema, que quieren conseguir la prevención de la obesidad, especialmente en niños y jóvenes.
Fuentes bibliográficas: http://www.naos.aesan.msssi.gob.es/