¿Qué es la felicidad? (y 5) La felicidad es una decisión

Por Robertosancheze

(Ni tú ni yo. No hablo ni de ti ni de mí. O sí. No te tomes esto como algo personal.)

<<Este post es la quinta y última parte de una serie de 5, por eso puede parecer incompleto. Antes, te invito a leer:

  • ¿Qué es la felicidad ? (1) Qué no es la felicidad
  • ¿Qué es la felicidad ? (2) ¿Es un estado mental?
  • ¿Qué es la felicidad ? (3) La felicidad no es si sensación, ni emoción, ni pensamiento
  • ¿Qué es la felicidad ? (4) La felicidad no se puede definir>>

Así que la respuesta de todo este lío no reside en la consecución de la felicidad –no puede alcanzarse.

Creo que el nuevo salto evolutivo, el nuevo logro lo darán aquellos que sean felices conscientemente, los que elijan experimentar la felicidad, los que decidan ser felices, aquí y ahora, a propósito.

¿Los ingredientes de esa felicidad consciente? Los mismos que la inconsciente, presencia, serenidad, satisfacción y aceptación. Pero añadiendo uno más, la propia conciencia.

¿Y la receta? Imposible definirla. Cada cual debe diseñarla y experimentarla, aunque creo que dos aspectos son básicos.

El primero, la práctica.

La felicidad no puede experimentarse desde la teoría. De hecho, la vida no puede vivirse desde la teoría. La teoría nunca ha sido experimental. O como decía Einstein: “La teoría es asesinada, tarde o temprano, por la experiencia”.

Quien quiera ser feliz, quien decida ser feliz, deberá practicar la felicidad.

Y el segundo, el coraje.

Somos seres sociales, vulnerables y dependientes del grupo. Al mismo tiempo, los que queremos ser conscientemente felices, aunque muchos, todavía somos pocos respecto a la mayoría. Somos diferentes –y eso no nos hace mejores ni peores; a cada cual le llega su momento si tiene que llegarle. Las diferencias no gustan a los grupos, ni tan sólo a nuestra propia herencia evolutiva en nuestra manera de relacionarnos –por eso de la necesidad de aprobación y reconocimiento.

En este preciso instante de la historia, en nuestra sociedad y cultura, quien quiera ser feliz debe ser valiente y superar básicamente dos miedos. Por un lado, el miedo a la soledad, la consecuencia de elegir una vía alternativa, salirse del rebaño. Y por otro lado el propio miedo natural a lo desconocido, a no saber lo que ocurrirá, el mismo miedo a ser feliz.

¡Cuánto trabajo!

Pues sí. La felicidad requiere de todo eso… Práctica, valentía, presencia, aceptación, serenidad, conciencia… y esfuerzo.

Que sea o no sea fácil ser feliz ya va a ser una mera interpretación de cada uno, pero de lo que no me cabe ninguna duda, contradiciendo a algunos libros de autoayuda y psicología barata, es que la felicidad consciente requiere de dedicación, muchísima dedicación. No puede ser de otra forma en la cultura de la teoría, el miedo, la dispersión, el juicio, la ansiedad y la inconsciencia, todo lo contrario a ser feliz conscientemente.

Ser feliz representa entrenar, practicar, cocinar, cultivar, esforzarse, trabajar por ser feliz.

La felicidad consciente es una experiencia reservada únicamente a los que decidan ser felices.

Esto es sólo mi opinión, que cambia constantemente. No me creas. Crea la tuya.