La preeclampsia es una enfermedad que se puede presentar en el embarazo afectando al rededor de un 5% de mujeres embarazadas.
Se diagnostica preeclampsia en las mujeres embarazadas cuando se presenta hipertensión arterial, edemas (retención de líquidos) junto a proteínas que son expulsadas por medio de la orina, éstos problemas se pueden detectar después de haber cumplido las 20 semanas de gestación, en el momento del parto o incluso después de haber dado a luz. También es posible tener preeclampsia antes de la semana 20, pero sólo sucede en casos muy raros, como por ejemplo cuando hay un embarazo molar (óvulo fertilizado que crece anormalmente). La preeclampsia puede ser de leve a severa y puede progresar lenta o rápidamente. La única manera de mejorar es dar a luz el bebé.
Debido a que la preeclampsia puede aparecer de repente, es muy importante saber reconocer los síntomas para ponerse en contacto con el ginecólogo inmediatamente. Algunos síntomas son:
- Hinchazón en la cara o alrededor de los ojos.
- Hinchazón excesiva en las manos, pies o tobillos (debido a la retención de líquidos).
- Dolor de cabeza fuerte o persistente.
- Alteraciones de la vista, como visión doble, borrosa, con puntos o destellos de luz.
- También se puede notar una sensibilidad a la luz o puede existir una pérdida temporal de la vista.
- Molestias fuertes o dolor al palpar la parte superior del abdomen.
- Nauseas o vómitos.
Algunos de éstos síntomas como la hinchazón en las partes del cuerpo mencionadas, pueden ser molestias normales del embarazo, es por ello la importancia de siempre comunicar al doctor los síntomas y no ausentarse a ninguna cita programada durante el embarazo.