Responder esta pregunta presupone que has hecho algún seguimiento de tus actividades de la semana. Quizás has definido tus prioridades el lunes pasado. O tal vez puedes revisar tu agenda para recordar cómo te ha ido a lo largo de la semana. ¡Has cumplido con tus objetivos? ¿Has reservado suficiente tiempo para ti misma o ha sido una carrera contra el reloj? ¿Qué has aprendido esta semana, y qué harás diferente en la semana por venir?
Aprendizaje a base del éxito: lo que ha ido bien
Habrá cosas que han ido bien esta semana. Has cumplido con tu horario de trabajo, a pesar de los nuevos proyectos que han entrado. Has conseguido meditar aunque sea algunos días de la semana y has tomado las escaleras más veces que otras. A lo mejor también has avanzado con algún proyecto personal, dedicando unos minutos cada día a qué avance.
Es importante revisar estas cosas que sí han ido bien esta semana, en vez de solo concentrarte en aquello que no funcionó. Los éxitos te pueden enseñar estrategias y darte ideas que quizás puedes utilizar en otros ámbitos de tu vida. Si poner un alarma te ayuda a recordar hacer una llamada importante, quizás puedes usar este truco también para otros recordatorios.
Aprendizaje a base de experimentos: lo que puedes mejorar
Probablemente también haya cosas esta semana que no han ido tan bien, a pesar de las buenas intenciones. Por ejemplo, uno de mis propósitos esta semana era llamar a mi hermano para organizar su visita de la semana que viene. Me había olvidado de que yo esta semana solo volví a casa temprano el miércoles, día en que mi hermano se encuentra con sus amigos. Es un buen recordatorio de no solo poner intenciones, sino también revisar horarios: los tuyos y la de la gente que están involucrados.
O quizás has intentado levantarte más temprano, sin éxito. En vez de tirar la toalla y decidir que no eres capaz de cambiar, revisa exactamente lo que ya has probado para experimentar con otras ideas durante la semana que viene. Quizás te has ido a dormir muy tarde, o el botón del “snooze” ha sido demasiado tentador. Si consigues definir exactamente lo que no te funcionó, podrás tomar medidas y experimentar con otras opciones, como ponerte un alarma para ir a dormir antes de la media noche o dejar el alarma directamente fuera de tu habitación.
Lo intentaré nuevamente la semana que viene…
Si algo no ha salido bien esta semana y quieres volver a probarlo la semana que viene, asegúrate de modificar tu estrategia de alguna forma. Intentarlo con más ganas, haciendo lo mismo raramente te dará un resultado diferente. Quizás los primeros dos días, pero a la medida que se desvanece tu fuerza de voluntad, volverás a los problemas que ya puedes reconocer esta semana.
¿Qué has aprendido esta semana?
Si te gustaría que yo te haga esta pregunta en persona cada viernes, informarte sobre el coaching de hábitos, el grupo de mentoring o el programa VIP que abrirá sus puertas en octubre.