El primer paso es entender y conocer su condición y motivarse para participar activamente en el control ya que el objetivo principal es el control de la afección. Por ejemplo, siendo el caso de una persona que padezca dos veces por semana crisis severas, un objetivo real es que pase a tener 1 o 2 crisis de migrañas leves al mes. En una segunda instancia hay que prohibir factores que puedan desencadenar la migraña. Esto va a depender del estilo de vida que cada paciente pueda llevar. Los elementos disparadores más comunes son el alcohol, los chocolates, las comidas rapidas y con muchos conservantes, el stress crónico y la falta de alimentación. La tercera instancia es el tratamiento farmacológico, que incluye los tratamientos para las crisis de dolor, tratamientos agudos y los tratamientos para prevenir el dolor y los síntomas asociados. Es importante llevar a cabo actividad física aeróbica, ejercicios de relajación muscular, tratamientos con Acupuntura que permiten en parte controlar el sistema nervioso y anestesia sobre nervios especiales que reducen el dolor de cabeza. Las drogas antiinflamatorias con mayor eficacia son el naproxeno sódico, ibuprofeno, acido tolfenamico y acido nefenamico, entre otras. La Ergotamina es muy efectiva siempre que sea utilizado bajo prescripción médica y en forma medida, los Triptanes son muy efectivos y con menor incidencia de efectos adversos que en muchos otros. Es importante que sean prescriptos por el profesional médico debido a que hay algunos pacientes con problemas cardíacos o coronarios que no pueden ingerirlos.