La primera vez que lo cociné pensé, que al tener cebolla, no iba a gustar mucho, pero apenas se nota el sabor y como lleva salchichas es una de las cenas preferidas en casa. Menos mal que hoy si que he podido compartirla con tod@s ustedes.
Ingredientes:
Para la pasta:
-100 g. de harina
-50 g. de mantequilla
-1 cucharadita de sal (de café)
-2 cucharadas de agua
Para el relleno:
-6 salchichas Frankfurt
-2 cebollas
-50 g. de queso rallado (tipo emmenthal)
-50 g. de mantequilla
-200 ml. de nata para cocinar
-3 huevos (tamaño M)
-pimienta blanca
-sal
Preparación: Primero preparamos la pasta porque la tendremos que dejar en reposo. Ponemos la harina sobre un mármol en forma de volcán, añadimos la mantequilla cortada en trocitos, la sal y el agua. Amasamos ligeramente hasta obtener una pasta ligada, que no se pegue a las manos. Dejamos reposar durante 30 minutos.
Una vez pasado el tiempo de reposo extendemos la masa con un rodillo y forramos con ella un molde de tarta. Pinchamos varias veces el fondo con un tenedor y la cocemos durante 10 minutos a horno moderado (precalentado a 180º). Lo retiramos del horno pero no lo retiramos del molde. Reservamos para el relleno.
Para el relleno cortamos las cebollas en discos finos y las rehogamos en la mantequilla, a fuego suave, hasta que estén transparentes. Las escurrimos y reservamos. En la misma mantequilla freímos ligeramente las salchichas previamente cortadas en rodajas finas. Reservamos.
Batimos los huevos y lo mezclamos con la nata, el queso rallado, las cebollas y las salchichas, salpimentamos. Con esta mezcla rellenamos el molde.
Lo cocemos a horno suave (precalentado a 180º) hasta que esté cuajado y dorado (aproximadamente 35 minutos). Lo podemos servir en el mismo molde.