Mi periplo comenzó para encontrar esta parte del toro que tan difícil es de encontrar en las grandes superficies o super mercado comunes... el rabo de toro, una pieza que normalmente se encarga o que se encuentra en pequeñas bandejas de 3 o 4 rodajas... pues yo necesitaba al menos 3 kilos.
Afortunadamente en mi barrio aún existen y con todavía con mucho éxito las galerias de alimentación donde docenas de puestos ofrecen pescados, verduras y carne fresca y son el sitio perfecto para encontrar este tipo de alimentos. Efectivamente dí en el grano a la primera: -¿Tienes rabo de toro? - Si 3 -¿Cómo que 3?¿Que si tienes rabo de toro? Volví a preguntar ante su respuesta... - Pero no te digo que tengo 3... me respondió de nuevo riéndose...
Me llevé 2 rabos que pesaban 3 kilos y bien preparaditos en rodajas cortadas a sierra para fascinar a mis invitados y a mi misma por lo bien que me salió siendo la primera vez y para tanta gente ;-9
Ingredientes para 12 personas:
2 cebollas grandes
5 zanahorias
1 pimiento rojo
5 dientes de ajo
1 botella de vino tinto (aunque en la foto se vean dos al final solo usé una)
Caldo de carne
5 hojas de laurel
Sal
Pimienta
Harina para rebozar
Preparación:
Salpimentamos, enharinamos y doramos la carne en una cazuela amplia con un buen chorro de aceite de oliva. Vamos apartando en un plato amplio según se vaya haciendo.
Cuando tengamos todos los trozos de carne dorados, pochamos en ese mismo aceite las cebollas, los ajos (pelados y enteros) y el pimiento rojo cortado en trozos no muy grandes. Añadimos el laurel y las zanahorias en rodajas y dejamos sofreir unos minutos para que se ablanden las verduras. Sazonamos.
Incorporamos la carne y suavemente la mezclamos con la verdura para que coja los sabores. Añadimos la botella de vino tinto y dejamos hervir un par de minutos para que evapore el alcohol. Completamos hasta cubrir con el caldo de carne.
Cocemos a fuego lento durante 3 horas y media con la cazuela tapada.
La carne estará lista cuando se despegue con facilidad del hueso.
Vamos sacando con cuidado la carne y la colocamos en una fuente de servir, pasamos la salsa por una batidora hasta que quede fina. (Debe quedar una salsa espesita y brillante si no tiene “consistencia” la ponemos a reducir en un cazo al fuego y añadirle un poquito de harina)
Emplatamos y servimos caliente.
Tengo que deciros que fue todo un éxito.