Estos últimos días la lluvia no nos deja en paz por Galicia así que salir de casa sin botas de agua no me lo he planteado, y es que a pesar de ser un calzado que hace siete años no ocupaba sitio en mi armario, desde que vivo por estas tierras es imprescindible, y al final, hasta les he cogido cariño porque también dan mucho juego. En esta ocasión las llevo en un look sencillo para cada día con jeans, jersey con estampado alpino, y abrigo azul maríno. ¿Que os parece?
¡Feliz semana! Gracias por vuestros comentarios! ;)