Cuando terminas de pintar algo, además de preocuparte por borrar los rastros no deseados de tu paso por las distintas habitaciones, te encuentras con latas y botes de pintura vacíos que te cuestan al menos un viaje al contenedor. ¿Te has planteado no deshacerte de los ‘cadáveres’?
Una opción más ecológica incluso que reciclar es darle un nuevo uso a todos esos objetos que normalmente desecharíamos, y las latas de pintura no tienen que ser menos que los palés, el material estrella para este tipo de proyectos. Las hay de distintos tamaños, pero si compras la pintura en envases grandes y te gustan nuestras ideas, aplícalas a botes de conserva, ¡de esos sí que no te costará encontrar de todos los tamaños!Una forma muy sencilla de reutilizarlas es convertirlas en maceteros. Pinta por fuera cada uno de los recipientes del color que te apetezca, taladra un pequeño agujero en la base para que el agua del riego pueda circular, coloca una base de piedras y ya puedes rellenarlo con tierra y tu planta favorita. Si además haces unos orificios en los laterales para pasar una cadena o cuerda y colgarlos en vertical, te puede quedar así de bonito. En la siguiente propuesta han reutilizado distintas latas como lapiceros y han aplicado la técnica ‘dip and dye’ para decorarlos. Cuando los botes están manchados de pintura por la parte superior y te da pereza limpiarlos, puedes pintarlos a la inversa de como aparece en la foto para disimularlo y ahorrarte el rato de frotar con disolvente. ¿Tienes jardín? Puedes reutilizar una lata para hacer un comedero para pájaros. Sólo tienes que pegar en su interior un palo o ramita que sobresalgan para que puedan apoyarse los pájaros, rellenarlo de alpiste y colgarlo de una cuerda. Para un acabado diferente al de la lata pintada, prueba a envolverla con cuerda de fibras naturales y utiliza esta misma cuerda para colgarla. Y para el último lugar hemos dejado nuestra idea favorita, estas luminarias para tu porche o balcón. Pinta las latas de colores y taladra pequeños agujeros de distintos tamaños dibujando el motivo que tú quieras. Si la superficie es fina y no tienes a mano un taladro, puedes hacerlo con una púa y un martillo aunque cuanto más delgada sea la lata, más posibilidades hay de que se deforme al aplicar presión. ¿Quieres un truco? Rellena la lata con arena y compáctala antes de empezar a hacer los agujeros, evitará que se hundan los laterales. Después puedes colocarles un asa de alambre y poner una vela en el interior, ¡el resultado por la noche será espectacular!
¡Que tengáis una feliz semana!
Fuentes imágenes: Simple as that, DIY Network, 100gardens, Frkmayasloft, Plumadorable, CraftFoxes.