Este fin de semana nos vamos a Vigo…!! Uno de los destinos imprescindibles del norte de España, Vigo es la mayor ciudad de Galicia. Además de su maravilloso entorno natural, sus famosas playas y las Islas Cíes, descubrirás una auténtica ciudad industrial: dinámica, emprendedora y vanguardista.
Vigo es una ciudad con carácter que conjuga tradición e innovación y nos ofrece todo un abanico de posibilidades, desde dejarnos llevar por sus calles históricas, recorrer un sendero natural en pleno centro de la ciudad, como en el monte de O Castro, o conocer una industria histórica de pesca, motor e innovación.
En definitiva, estamos en una ciudad para disfrutar, única y distinta a todas.
El viernes por la tarde visitamos el Museo Verbum y el Monte de O Castro
El Museo Verbum de Vigo, también llamado Casa das Palabras es uno de los más llamativos, se ubica en la Playa de Samil, y es un proyecto del arquitecto gallego César Portela. El Verbum es un museo interactivo que permite experimentar y conocer, a través de juegos, todo lo relacionado con los lenguajes, los idiomas, las palabras, las letras, los sonidos, los signos… En definitiva, todas las formas de expresión de la comunicación humana.
El edificio, se estructura en cuatro plantas (semisótano, planta baja, planta superior y cubierta) unificadas por una caja de luz que las atraviesa y las relaciona, y en la que se estructuran las comunicaciones verticales. La superficie total construida es de más de 5.000 m2, ubicados en una parcela de más de 13.000.
El proyecto es un conjunto de cajas que se mezclan entre sí, generando espacios y situaciones que se interrelacionan. El conjunto parece sostenerse en el vacío, ya que cada caja se rasga, se agrieta y se manipula, para permitir una entrada de luz que va creando ámbitos claros u oscuros, luminosos y sombríos a medida que transcurre el día.
Avenida de Samil, 17
O Castro es el parque con las mejores vistas de Vigo sobre la ría. En el corazón de Vigo, es hoy día uno de los símbolos de la ciudad y punto de origen donde se asentaron los primeros pobladores. Está ubicado cerca del mar y tiene una altitud máxima de 133 metros, es uno de sus parques más extensos.
Hace poco más de un siglo, su vegetación típica solía ser de monte bajo costero, y estaba totalmente formado por tierra. En la actualidad, su vegetación es muy heterogénea, cuenta con muchos senderos y diferentes tipos de árboles.
Contiene varios símbolos de un pasado histórico como la fortaleza del siglo XVII situada en lo más alto del monte, desde donde es posible observar la urbe y la ría de Vigo y en la ladera más baja podemos visitar su yacimiento castreño y ver cómo era la vida en Vigo entre los siglos III y I a.C.
Podemos subir a pie desde la Plaza de España o desde la calle Camelias para ir adentrándonos en senderos naturales y ascender a lo más alto mientras disfrutamos de las increíbles vistas.
Tomamos unas tapas en Tapas Areal y cenamos en Mesón O Portón
Ubicados en pleno centro de Vigo desde 1992, es uno de los locales más tradicionales de la ciudad. Una comida deliciosa, variada y de una gran calidad. Tiene una zona de mesas altas y mostrador para tapear y un pequeño comedor con mesas. Se recomienda probar su tortilla y la empanada de zamburiñas, el pulpo a la gallega y el revuelto de erizo y queso tetilla, todo exquisito. Un clásico de los que nunca fallan.
C/ México, 36
En mesón o Portón nos vamos a encontrar comida tradicional gallega, especializada en la elaboración de arroces y mariscadas de muy buena calidad con unos precios muy razonables.
La mariscada es sobresaliente y el arroz con vieiras y zamburiñas inmejorable. Probamos también las ostras, deliciosas y fresquísimas. Dejaros aconsejar y acertaréis…!!
C/ Pescadería, 1
Nos alojamos en Hotel Puerta Gamboa
Os proponemos esta opción con un precio más razonable y una reconocida relación calidad-precio. Ubicado en el casco antiguo de la ciudad, a 50 metros del puerto deportivo y la Estación Marítima, en un edificio del siglo XIX, este hotel ha sido rehabilitado completamente, dotándole de confort y funcionalidad, pero respetando la esencia de su tiempo.
Los balcones originales en la fachada de granito le confieren un carácter y personalidad único. En su interior se han utilizado materiales nobles de gran calidad, maderas macizas, piedra original del edificio, finísimos pavimentos y saneamientos de diseño.
C/ Gamboa, 12
Otro hotel que nos ha gustado mucho es el Gran Hotel Nagari Boutique & Spa, es un nuevo Hotel de vanguardia situado en el corazón de Vigo, a escasos metros del Puerto y la zona financiera y comercial. Ubicado en un edificio histórico, conserva su imponente fachada. En su interior el diseño de cada uno de sus espacios está marcado por líneas clásicas y orientales fusionadas con el vanguardismo más moderno, obteniendo como resultado un marco de elegancia incomparable.
El lujo en los detalles y el servicio personalizado, junto con la acogida en las habitaciones llena de pequeñas atenciones, le permitirán experimentar un estilo de vida único.
Plaza de Compostela, 21
El sábado por la mañana visitamos el Museo de Arte Contemporáneo
El Museo de Arte Contemporáneo de Vigo, es el centro con las propuestas más vanguardistas de arte en Vigo, ubicado en la calle peatonal del Príncipe, una de las más populares de la ciudad.
En el MARCO siempre podrás disfrutar de exposiciones temporales, dedicadas a la producción artística más reciente en diferentes ámbitos creativos: artes plásticas, arquitectura, vídeo, arte en la red, diseño, cine, música, moda, etc.
El museo ocupa un edificio rehabilitado desde 1995 y situado en pleno centro de la ciudad, que fue cárcel y juzgado, y declarado Bien de Interés Cultural en 1990.
En 1861 el arquitecto José María Ortiz y Sánchez redacta el proyecto de construcción del edificio. Es de planta hexagonal irregular formada por un cuerpo rectangular con fachada a la calle Príncipe, un cuerpo circular en el centro del que parten tres naves radiales y por último varios cuerpos laterales que cierran los lados del inmueble. A éste tipo de planta se la conoce como panóptica y se utilizaba en la construcción de cárceles en el siglo XIX facilitando la vigilancia, a la vez que se creaban varios patios exteriores para la ventilación y la entrada de luz natural, además de espacios abiertos para los presos.
La remodelación del edificio se inició en 1999 y concluyó en el año 2001, para convertirlo en el museo de arte contemporáneo de la ciudad, la remodelación se encargó a un equipo vigués de arquitectos formado por Manuel Portolés Sanjuán, Francisco Javier García-Quijada Romero y Salvador Fraga Rivas.
En la reforma se mantuvo el esquema original del antiguo edificio. Destaca frente a otros museos su trazado panóptico en las salas de exposición. Su estructura está formada por tres galerías y cuatro patios que parten de un núcleo central, rodeados de salas, con lo que se desplaza la entrada de las salas de exposición desde la fachada al centro.
C/ Príncipe, 54
Comemos en la Calle de las Ostras en Mercado de la Piedra
La calle de las Ostras situada en el casco viejo de Vigo, va ligada al popular Mercado de la Piedra, situada debajo del mercado que se dedica a la venta de ropa, tabacos y electrónica principalmente, es muy curioso pasear por aquí.
En la calle de las Ostras, que recibe este nombre por el cocedero, la exposición y posterior degustación de este molusco, hay restaurantes de comida tradicional, sobre todo pescados y mariscos, y en la misma calle hay puestos de señoras que llevan toda la vida vendiendo las ostras que la gente come en la calle. Se la conoce principalmente por los turistas que se acercan al puerto a saborearlas acompañadas de una copa de vino albariño y es uno de los principales atractivos de la ciudad… Las “ostreiras” sirven a un precio muy razonable las ostras recién llegadas de los viveros que hay por toda la Ría de Vigo. Las mariscadas son, junto con las ostras, el plato estrella. Es un gustazo acercarse a una de las piedras y por pocos euros comprar media docena de ostras para degustar con el vino blanco gallego.
En esta calle emblemática además del “Mercado da Pedra”, hay una buena cantidad de cafes y restaurantes en el que saborear otros productos del mar, como la sepia o el calamar.
Queremos reconocer el mérito a la labor de las “ostreiras” que llevan toda la vida en el mercado abriendo ostras. La mayoría aprendieron el oficio de sus madres, y actualmente cada vez quedan menos, y las que quedan pasan de los 70 y están a punto de jubilarse, su labor fue premiada por el Consejo de Ministros con la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo.
Por la tarde visitamos Bayona
Bayona es una pequeña ciudad costera española, de la provincia de Pontevedra, propia para el descanso en los meses estivales, en los que la ciudad cobra un bullicio especial. Se halla enclavada en un bellísimo territorio costero, en la parte sur de la ría de Vigo. La población está dividida en varios barrios o parroquias y goza de una ubicación privilegiada, relativamente abrigada de los vientos oceánicos, en una bahía que se abre con el telón de fondo de las Islas Cíes. El elemento geográfico más destacado de la ciudad es la pequeña península sobre la que se alza el castillo de Monterreal, ahora Parador de Turismo, que parece vigilar la bahía.
Visitamos en primer lugar el Parador de Bayona. Situado al sur de las Rías Baixas, protegida del mar abierto por una preciosa bahía, se encuentra la península de Monterreal donde se ubica el Parador, ocupando una península al lado del casco antiguo, rodeada por fuertes muros que corresponden a la vieja fortaleza de Monterreal. La fortaleza nos brinda sus murallas para pasear, descansar, o tomar algo frente al mar, y a lo lejos, las Islas Cíes.
La fortaleza original es del siglo X, aunque las murallas corresponden a los inicios del siglo XIV. Entre las viejas estructuras, tres torres de vigilancia: la Torre del Reloj, la Torre de la Tenaza y la Torre del Príncipe.
Las vistas que se tienen desde lo alto de la península son magníficas. Rodeando la zona del parador hacemos un agradable paseo que nos conduce por el entorno del puerto deportivo y de varias playas.
Visitamos también la Carabela Pinta. En la ciudad hay una réplica exacta de la carabela que llevó a los conquistadores a descubir América, y que se hizo con motivo del V centenario del descubrimiento. Bayona fue el primer puerto de Europa que recibió la noticia del descubrimiento de América. El 1 de marzo de 1493, la carabela Pinta, capitaneada por Martín Alonso Pinzón, atracó en estas aguas. En 1999 se reacondicionó el pequeño museo que alberga la nave, dotándola de todos los elementos de la época colombina, tanto de la cultura cristiana como de la indígena. De esta manera el visitante puede contemplar la carabela tal y como llegó a Bayona en 1493 y revivir la gesta del descubrimiento.
Cenamos en La Galeria y tomamos un mojito en D’sastre
Un encuentro con la gastronomía gallega donde saborear los mariscos y pescados de las Rías, o la ternera gallega, pasando por unas exclusivas tapas y todo acompañado por los excelentes vinos denominación de origen de la tierra. Tapas innovadoras y muy buena relación calidad-precio. Se recomiendan sus espectaculares zamburiñas y el revuelto de tetilla.
Reloxo, 7
El D’sastre destaca por su decoración, inspirada en un taller de costura, y también por sus mojitos. Este local era un taller de costura, una antigua sastrería, y utilizaron los enseres que se conservaron para decorar de forma muy original el nuevo establecimiento. Uno de los bares más originales de Bayona.
El domingo visitamos las Islas Cíes
Las Islas Cíes son el mayor tesoro de la ría de Vigo, un increíble Parque Nacional Marítimo-Terrestre y uno de los lugares más hermosos del país, de ahí que los romanos les pusieran el nombre de “las islas de los dioses”. Las islas pertenecen al Municipio de Vigo y se encuentra en la Ría de Vigo formando una barrera natural entre la ría y el mar, convirtiéndose este puerto en uno de los más seguros del mundo. Para acceder a las Islas Cíes existe un catamarán con líneas regulares que en verano une Vigo, Bayona y Cangas con el archipiélago.
El archipiélago de Cíes está compuesto por tres islas: Monte Agudo, O Faro y San Martiño. Las 2 primeras unidas por un largo arenal.
Forma parte del Parque Nacional Illas Atlánticas, un paraíso de playas paradisíacas y aguas cristalinas, con un entorno natural que lo convierten en un observatorio de fauna y flora único. Una visita es ideal tanto para practicar senderismo en familia como para una escapada en busca de playas vírgenes y tranquilas.
Las nueve playas de Cíes te conquistarán por su estado salvaje, su arena blanca, finísima, y sus aguas cristalinas. La más conocida es la playa de Rodas que fue escogida como la mejor playa del mundo por el diario británico The Guardian, más de un km de largo y 60 m de ancho arropan un arenal impresionante. La playa une las islas de Monteagudo y de Faro. Posee una arena fina y blanca, así como unas aguas cristalinas de color esmeralda. Junto a ella se conservan zonas de dunas naturales.
Es recomendable sacar los pasajes de barco con antelación porque solo se permite un número limitado de 2200 visitantes al día.