Durante los test de invierno y las primeras carreras, la escudería de Milton-Keynes aprovechó un resquicio en el reglamento para ubicar una cámara dentro del morro, concretamente en el vanity panel según ha publicado Auto Motor und Sport.
A pesar de que cumpliría con lo que se indica en el reglamento, la FOM no está satisfecha con la calidad de las imágenes que no mejoraron a pesar de las modificaciones realizadas en el Gran Premio de España, especialmente porque no pueden disponer de una cámara que enfoca el sentido de avance del coche y otra en sentido opuesto. Por tanto, Red Bull usará a partir de ahora el montaje estándar de la FIA, igual que hace Mercedes, Ferrari, McLaren, etc...