Sin restar mérito a los profesionales del Miguel Servet, ese estudio ya fue publicado en The Lancet Neurology en Noviembre del 2007 (hace 5 años), aunque con una pequeña muestra de pacientes en Estados Unidos.
Cito la Noticia:
Científicos estadunidenses de la Universidad Johns Hopkins presentaron un estudio, de costo moderado y que toma cinco minutos, para medir adecuadamente el grado de daño que sufre el cerebro de personas que padecen la enfermedad neurodegenerativa Esclerosis Múltiple. Esta herramienta de diagnóstico permite analizar la velocidad con la cual está avanzando la enfermedad.
Peter Calabresi, profesor de neurología en la Universidad Johns Hopkins, coordinó un equipo que aplicó a 164 pacientes un estudio del fondo del ojo llamado Tomografía de Coherencia Óptica (OCT por sus siglas en inglés). Con ese estudio se obtiene un mapa de todos los nervios que están funcionando, correcta o incorrectamente, en el fondo del ojo y en la parte trasera del ojo.
Este mapa es sumamente detallado gracias a un programa especial de cómputo o software que permite medir a mayor profundidad la presencia o no de nervios activos, pues la retina está construida con diferentes capas de células y otros programas sólo analizan la superficie.
“El ojo es una ventana hacia el cerebro y midiendo cuán saludable está el ojo podemos determinar cuán saludable está el resto del cerebro”, escribió el profesor Calabresi en el artículo donde da a conocer su método de diagnóstico, el cual fue publicado en la revista médica The Lancet Neurology.
Calabresi y su equipo de 25 investigadores han recibido financiamiento para sus investigaciones, desde 2004, por parte de la Sociedad Americana contra la Esclerosis Múltiple.
“Los análisis de ojo no son caros, son realmente seguros y son ampliamente utilizados en Oftalmología, y ahora que tenemos evidencia de su valor predictivo en Esclerosis Múltiple. Después de ver los resultados acertados en 164 pacientes, sugiero que deberíamos utilizar esta nueva herramienta cuantitativa para aprender más sobre la progresión de la enfermedad, incluyendo la atrofia del cerebro y daño de nervio”, indicó el profesor de la Universidad Johns Hopkins.
El nuevo estudio del fondo del ojo es capaz de evaluar capas del tejido de retina sensible a la luz que previamente no se podían medir. El análisis no utiliza ninguna radiación dañina y cuesta una décima parte que una resonancia magnética. El software pronto estará ampliamente disponible comercialmente.
En el artículo escrito para The Lancet Neurology, Calabresi y su equipo informaron que se midió el espesor, inflamación y presencia de daño en los nervios de la capa nuclear interna de la retina en 164 pacientes con Esclerosis Múltiple y se contrastó con 60 pacientes sanos. Además, el estudio evaluó los cambios en todos los pacientes estudiados a lo largo de cuatro años. Al mismo tiempo, también utilizó el cerebro resonancias magnéticas para medir puntos de inflamación directamente y ver si sus resultados (que fueron mucho más caros) coincidían con los resultados observados en el estudio del fondo de los ojos.
Entre más inflamación e hinchazón encontraron los investigadores en las retinas de los pacientes con Esclerosis Múltiple, también había más inflamación y daño en las imágenes de resonancia magnética del cerebro. La correlación, dijeron, afirmó el valor de las exploraciones de la retinales como una herramienta de diagnóstico independiente para el daño cerebral. Tener esa información tan fácilmente disponible podría permitir a médicos contar con precisión hasta qué punto la enfermedad ha avanzado y asesorar mejor a los pacientes sobre cómo debe proceder con su atención.
Para mas información, ver el articulo de la Asociación Española de Oftalmología del 2007, donde ya se citaba este avance : http://scielo.isciii.es/pdf/aseo/v82n12/editorial1.pdf