Reflexiones: Células madre

Por Lolamontalvo
Hoy me lanzo a escribir una entrada referente a las Células Madre, tema que, creo, puede interesar mucho a todos, profesionales de la salud o profanos en la materia. Me imagino que muchos de los profanos en el ámbito de las ciencias de la salud y de la medicina, en un momento u otro, han escuchado en los medios de comunicación o han leído en publicaciones especializadas en qué consiste esta nueva puerta que se ha abierto en la investigación actual y que proporciona un enorme abanico de posibilidades en lo que respecta a terapias de diversos tipos.No voy a entrar en las cuestiones científicas, es decir, en explicar cómo se obtienen las células madre, cómo se procesan, qué patologías son susceptibles de ser tratadas por este medio, qué futuro tiene esta rama de la investigación actual... Creo que es demasiado farragoso de explicar y de plasmar en un espacio -éste- que pretende, ante todo, ser entretenido y comunicativo, a la par que práctico. Pero, para quien pueda sentir un picorcillo en su curiosidad, en este enlace encontrará mucha información de su interés, por lo menos como inicio en el tema.En lo que sí voy a entrar es en los aspectos éticos, ésos que algunos cuestionan a la hora de ponerse a trabajar en este campo de la ciencia. Eso sí, no iré más allá de plasmar una mera opinión.Hasta hace relativamente poco tiempo, sólo se utilizaban células madre procedentes de embriones. Muchos de ellos eran el resultado de fecundaciones in-vitro no utilizados o desechados que, pasado el tiempo legal de conservación, se debían destruir. Pues muchos científicos establecieron la cuestión por la cual, en lugar de destruirlos se podían aprovechar para obtener las células cuya diferenciación aún no está definida y que permite a priori obtener cualquier tipo de tejido humano para restablecerlo o sanarlo. Es decir, utilizar los embriones como fuente para obtener células madre.Más tarde se crearon los bancos de cordones umbilicales, muchos privados, aunque también existen de tipo público, mediante los cuales almacenar tejido sanguíneo umbilical cuya posibilidad de generar células madres era similar al embrionario. Algunos buscaban esos «bancos» como una especie de seguro de enfermedad o vida en caso de que algún hijo sufriera una patología grave.Estudios recientes han permitido obtener células madre con gran capacidad de diferenciación en tejidos habituales en adultos como la médula ósea o en el tejido adiposo. Ello supondría no tener que recurrir a embriones para obtener las células madre con las que trabajar.¿Cual es el temor con respecto a estos temas? Como hace años se consiguió clonar un mamífero como una oveja, la famosa y ya fallecida Dolly, es aceptable que se tenga el temor de que se llegue a clonar una persona. Se dice que hoy día eso no es posible, pero supongo que muchos pueden tener sus dudas. Y es lógico. Hasta ahora en lo que se está utilizando las células madre es en regenerar tejidos dañados de forma irremediable por patologías o accidentes: miocardio, en grandes infartos; tejido nervioso en daños medulares, alzheimer, isquemias cerebrales...; recuperación del páncreas endocrino y poder así curar la diabetes. Tumores, cáncer, patologías de la sangre... El campo es amplio y, por qué no decirlo, esperanzador.Entiendo que muchos tengan sus reparos a la hora de utilizar embriones humanos para la obtención de estas células. Entiendo que se defienda todo tipo de vida y que se aborrezca la posibilidad de un abuso por parte de los científico con tal de conseguir sus objetivos en investigación. Pero son embriones que de todos modos deben ser destruidos y que el hecho de aprovechar sus estructuras celulares posibilitaría la obtención de una cura para muchas patologías que hoy día son mortales. Regenerar tejidos irremediablemente dañados, obtener injertos para trasplantes... Yo no veo ningún atentado a la ética en este sentido, dado que sería algo similar a lo que se hace hoy día obteniendo tejidos, injertos y órganos de las personas que han fallecido. Poner la ciencia al servicio de las personas, de su cuidado, de su salud.Es indiscutible que aún estamos a las puertas de lo que la ciencia puede llegar a conseguir en esta materia y que un día se deberá plantear en nuestra sociedad la discusión sobre la idoneidad, la moralidad, lo aceptable de clonar personas... porque estoy absolutamente convencida de que un día se conseguirá. La cuestión entonces será establecer ¿cuál será el fin de esa «clonación»?Espero que esta entrada os haga pensar...Y, por ahora, nada más.