relato triste, vivir sin vida, esperanza y perseverancia...

Un golpe, una caída, convertida en perfecta amargura y agonía.Toda una vida de aciertos y errores, de repente la vida te golpea, una caída fortuita y cambia en ocasiones soberbia por dependencia...Una limpieza cristales, un tropiezo sin más.. desembocan en una parálisis que impide tener vida propia, pasando a depender de otros brazos, otras manos, otras piernas...Un futuro incierto con una sola certeza, una silla de ruedas como cadena perpetua, así le han comunicado el equipo de médicos.Un solo pensamiento inunda de tinieblas su mente....me ha tocado vivir una vida miserable, piensa, sin alicientes, dependencia absoluta, hasta hacer necesidades se convierte en acto molesto, donde requieres atención de los demás.Su marido, único compañero de vida, se ve obligado a internarla en una residencia de ancianos para que la cuiden, él es un ser formidable, pero no puede enfrentarse a su cuidado, demasiada responsabilidad médica, prefiere que la atiendan personas preparadas.Allí pasa cinco años de su vida como dependiente, viviendo con ancianos que llegan de su hogar y se van a un sueño eterno....Su única ilusión es ver a diario a su esposo y de vez en cuando a su hijo, dos visitas que son el mayor regalo de su vida, para ella no hay más motivos para vivir, los únicos motivos para olvidar que está viva...Cuando su marido, no va a verla, que va casi todos los días, ella cree que no la quiere porque es una carga no merecida....¿se puede vivir esta vida así? "que agradezca a la vida lo que tiene y que no la valore por lo que no tiene"quise decirle que la vida así no es vida, que debe ponerse una meta, no pensar en la tristeza de cada día al ver que su marido no puede ir a verla, le dije que es afortunada por tener un marido que la ama y le ayuda siempre que puede. Quise que entendiese que si consigue mover una mano o una pierna, a veces los milagros suceden, y puede dejar atrás la silla de ruedas, que la perseverancia ha transformado a los seres humanos, algunos han vuelto andar gracias a su tenacidad, le he dicho que a veces querer es poder, si uno quiere puede luchar por vivir la vida mejor, que ella es razón de vida para otros, es compañía para muchos, todos aportamos más de lo que pensamos y estamos para alguna misión que no hemos detectado.
 A la vida hay que entenderla, te explica las cosas con el lenguaje del universo, a veces duro y otras tierno, sentir la vida, amar la vida...
 La vida es una escuela desde la cuna a la tumba F.C., aprender sus lecciones es nuestro deber, de lo peor de la vida ha salido siempre lo mejor, con esfuerzo, paciencia y perseverancia se alcanzan metas y la última llave es la que abre.
No desistas en tu empeño de encontrarte contigo mismo
Utreia