Isabella Abad
Ciento setenta años después, una expedición de rescate se organiza para encontrar los restos del naufragio. El buzo y capitán argentino Sebastián Cortés ignora que, al poner a rodar sus sueños de exploración subacuática, también activa una trama antigua de ambiciones y venganza.
A bordo de su buque, el Incitatus, y custodiado por la bella Elvira Gamboa, de la familia noble de los Bedford, la búsqueda se teñirá de pasión y romance. Pronto todo se desvirtúa y prima la lucha entre los deseos de poder del Conde de Bedford y los de revancha de los O’Connell, clan que clama justicia por su antecesora abandonada y engañada para morir lejos de su tierra natal.
Un pequeño cofre en el lecho marino, un clan de airados escoceses, una rancia familia noble inglesa, un amor del pasado y otro del presente…
Una historia en dos tiempos que te asegura romance, pasiones y suspenso.
Cuando comencé la lectura me dio un poco la impresión que era una especie de Titanic (la peli de DiCaprio), ya que como base tenemos algo muy parecido, ya que tenemos a un “buscador” que ha sido contratado para poder recuperar unas joyas muy valiosas para una familia y mientras vamos viendo la relación que se da entre la nieta y el “buscador” en esta búsqueda (que por cierto en un principio son como el agua y el aceite, pero poco a poco debido a su convivencia, pues la cosa va pasando de ser hosco a ser algo “lindo”), al mismo tiempo vamos conociendo la historia que sucedió tiempo atrás, del cómo es que las joyas en un barco que se hundió y vamos conociendo esa historia de amor que parece tener más secretos de los que parece en un principio y vamos armando junto con el presente un rompecabezas que pareciera la faltan algunas piezas, pero Elvira al ir descubriendo ciertas cosas y que su “vida” llega un momento en que está en peligro, está decidida descubrir toda la verdad.
Sebastián, es hosco, fuerte… un hombre solitario que en un principio le molesta la presencia de Elvira, se nota su descontento en un principio, pero después de algunos baches logran llevarse en paz y hacer su trabajo. Al final ambos personajes es que a pesar de esas barreras que se ponen ambos, son hermosos en todos los sentidos, de esos que les cojes cariño, aunque ellos sean poco expresivos y solo abrirán su corazón cuando ven el peligro real que ha llevado esta búsqueda.
Tenemos dos historias de amor, una que va naciendo poco a poco y otra que van descubriendo, atando cabos entre toda la información que puede ir juntando Elvira y que como lo dije al principio, deja una sensación agridulce debido a lo que descubrimos y es donde me di cuenta que la ambición, intrigas, traiciones, el poder de algunos con la estúpida idea de mantener las clases sociales y los títulos nobiliarios pueden hacer lo que les venga en gana y joder la existencia de algunos y que de ahí venga el odio, la sed de venganza, entre otras cosas (ahora comprenden por qué me encabr·$%$&, porque con enojarme me quedaba corta jajaja), y vemos que la conjunción de todo esto puede tener graves consecuencias y no soplo en el pasado, llegando a afectar incluso personas que no debería al heredar esos sentimientos a pesar de las generaciones que han pasado.
Es una historia donde vemos como las acciones del pasado siguen afectando en el presente, sin importar los años que hayan pasado, acumulando más sentimientos negativos entre dos familias.
El final, puff fue de las cosas más bonitas, ver como dos casi cubos de hielo se derriten el uno por el otro y terminamos por descubriendo todos esos detalles que hacen linda y triste a la vez la historia de Kate y Roger.
Isabella tiene esa elegancia que se necesita para contarnos historias de época, de meternos en la piel de los personajes y transportarnos con facilidad al pasado, quizá sentí un poco más débil la parte actual, (me declaro fan de el romance histórico de la autora), a la parte contemporánea me faltó un poco que nos metiera más en situación, no diré que desarrollo ya que está bien descritas las situaciones y personajes y quizá en parte un poco por la personalidad de ambos personajes, es que sentía un poco lejana esa parte de la novela, o simplemente es que estaba absorta en el pasado, no lo sé, ambas épocas me gustaron, pero si sentí un poco floja la actual y más en el momento en que Elvira corre peligro, pero la conjunción de ambas historias, hace una lectura preciosa.
Isabella de nuevo me ha enamorado con esta novela, su pluma tiene esa elegancia de poder llevarnos al pasado sin problemas, tal vez sentí un poco flojo la parte actual de la historia, pero sin duda tenemos una historia bien hilada, narrada a la perfección entre dos épocas, con el desarrollo adecuado de situaciones y personajes bien perfilados, tenemos una lectura muy fluida, amena, que es casi imposible soltar la novela hasta terminarla.