Ellos son el uno para el otro. O tal vez no. Las almas gemelas existen, pero no como te lo imaginas.Cada tanto nacen dos personas que forman la pareja perfecta. Son almas gemelas.Pero ¿y si encontrar a tu alma gemela tuviera el potencial para destruir la tierra, literalmente?Una extraordinaria y épica historia sobre enamorarse. «Yo nunca había creído en las almas gemelas. Era una expresión hollywoodiense, un concepto inventado para vender literatura romántica y derechos de autor.A mi modo de ver, el amor era una obsesión mundial nacida de la fantasía desesperada. Daba igual que la gente hablara de amor, de romanticismo, del hallazgo de nuestra alma gemela y demás paparruchas. Para mí no era más que una cuestión de hormonas, de química y biología, envuelta en la ilusión de vivir felices para siempre, fruto del miedo a estar solos.Claro que siempre se es una cínica hasta que una misma se enamora.El problema era que Hollywood, Stephanie Meyer, Mills y Boon..., todos ellos tenían razón. Las almas gemelas existen de verdad.Lo que ninguno de ellos entendía es que encontrarla no siempre es algo bueno.»
Dos almas no es un libro que me llamase especialmente la atención. Para ser sinceros, su sinopsis no me parecía gran cosa y lo único que me impulsó a leer la novela fue que no tenía nada más a mano. Sin embargo, esta ha sido una de esas historias que, sin esperarlo, te maravillan por completo.
Poppy, la protagonista, narra el libro en primera persona y en algunas ocasiones se introduce una tercera persona que nos narra lo que ocurre en una especie de laboratorio, que poco a poco iremos desvelando de qué se trata. Sin ser un personaje complejo ni elaborado, Poppy me ha gustado desde el principio. Es una chica con las ideas muy claras y con mucha personalidad. Además, su forma de ver las cosas me ha resultado un tanto curiosa y en la mayoría de las cosas he coincidido con ella.
La narración de la autora es sencilla y fresca, con algunos toques humorísticos y los pensamientos de Poppy que aportan jovialidad. A pesar de sus 448 páginas, el libro se lee como si solo tuviese diez. De hecho no podía para de leer pero por otra parte no quería que acabase porque verdaderamente estaba disfrutando de la lectura.
El personaje masculino, Noah, es un tópico con piernas: guapo (muy, muy guapo), creído, forma parte de un grupo de rock, es rico (está muy, muy forrado)… Aún así, y a pesar de que no soy muy partidaria de los tópicos, ha conseguido enamorarme. Me da la impresión de que la autora ha creado este personaje lleno de tópicos a propósito debido a los temas que se tratan en la historia.
La relación entre Poppy y Noah no se hace empalagosa a pesar de que básicamente el libro trata de ella. La autora ha sabido jugar bien con estos personajes y variar momentos divertidos con momentos un poco más románticos. El desarrollo de los acontecimientos es acertado y hay momentos en los que la autora sabe transmitirnos muy bien lo que sienten nuestros personajes.
A pesar de que, como comentaba anteriormente, este parece un libro normal y corriente, para nada es así. En la recta final de la historia nos daremos cuenta de que Dos almas no es una simple historia de amory que va mucho más allá.
La novela se cierra con un epílogoque transcurre un par de años después de que se acabase y me ha dejado con un sabor agridulce. De todas maneras, el final me ha parecido cerrado y adecuado a la historia, y aplaudo a la autora por cómo ha sabido cerrar la historia.
Una de las mayores sorpresas del año