Después de lo mucho que me gustó el año pasado Steelheart (reseña aquí), estaba deseando que se publicara en España la segunda parte, Firefight. Y por fin ha llegado el momento, ya leído, de traeros mi opinión sobre la segunda parte de la trilogía The Reckoners.
Será una reseña corta ya que quiero contar lo mínimo del libro ya que es una segunda parte.
Si no habéis leído el anterior libro esta reseña puede contener spoilers.
Steelheart ha muerto en manos de nuestro protagonista David, y Chicago Nova al fin es libre. El Profesor, Tia y David viajan a Babilonia Restaurada, antigua Manhattan, para llevar a cabo una nueva misión. Es una ciudad inundada gobernada por la Gran Épica Regalia. Allí se encuentran con otros Reckoners que no conocemos hasta el momento. Y descubrimos que lo que realmente quiere David es encontrar a Firefight.
Firefight sigue estando narrado desde el punto de vista de David, el protagonista. Un protagonista que me sigue pareciendo muy real, con sus fallos ya que no es un protagonista perfecto. Para mi eso es un buen punto ya que hace que parezca más real. Hay nuevos personajes secundarios, entre ellos destaco a Mizzy. Mizzy es una chica de la edad de David y me ha gustado especialmente. Tiene momentos muy divertidos junto a David.
También me ha gustado conocer más y mejor al Profesor, me parece un personaje muy importante y necesario. Y aunque en ciertos momentos no comprendí su actitud me gusta mucho su personaje. También me ha gustado conocer más a Megan, fue uno de los personajes que más me gustaron en el primer libro.
La narración me atrapó desde el principio, tiene muy buen ritmo y tiene mucha acción. Eso hace que no puedas parar de leer. Además es todo muy visual y te lo puedes ir imaginando a medida que lo vas leyendo.
En general me ha gustado incluso más que el primero, cosa que me parecía imposible. Y el final me encantó, me dejó con ganas de leer ya la tercera parte. Lo estoy deseando y espero que me guste tanto como los dos anteriores.