Cuentos de Barrios # 3
Katy Molina
Por otro lado, Yi Zun, no puede resistirse a la atracción que siente por Blanca, y decide aceptar su destino para ayudarla. Aunque nada es fácil en esta vida y menos cuando perteneces a una organización criminal y hay un traidor oculto en las sombras.
El peligro, la emoción y la aventura serán los condimentos de esta novela, que adereza una preciosa historia de amor capaz de aunar los mundos más dispares que jamás se pudieran imaginar.
Ahora, sentaos a disfrutar de la lectura y recordad que nada es lo que parece salvo el amor sincero.
Esta es la tercera y última parte de esta saga, que aunque tenemos personajes muy diferentes a los entregas anteriores, volvemos a verlos un poco en la trama, por lo que de alguna manera seguimos en ese mundo inseguro del Bronx donde las pandillas y el peligro de vivir en esos barrios es latente.
En esta ocasión conoceremos a Blanca, una chica que podría tener ciertos complejos debido al vitíligo que padece, es que nos encontramos a una chica fuerte, determinada y sin miedo a enfrentar cualquier cosa que ella cree es lo justo. Es pobre, y tiene un puesto de manzanas junto a su abuela, de ahí y jugando un poco con su piel y el nombre del puesto es que tenemos el título de la novela. Gracias al producto que vende, es que conoce a Yi Zun, el que se supone debería ser el heredero de los Yakuzas en NY, pero dado que no concuerda con lo que su padre e incluso su abuelo siguen la tradición de esta organización, él se ha separado y renunciado a esta imposición y se ha despejado de ellos, haciéndose independiente y abrió un restaurante. Pero resulta que un atentado, un secuestro, un supuesto traidor, es que acude a su abuelo para tratar de resolver todo este embrollo, donde obvio la ambición del poder y la sed de la venganza está a la orden del día.
Él intentará resolver esto, pero ya que Blanca de alguna manera ha sido involucrada y corre peligro, junto a ellos veremos cómo trabajarán al mismo tiempo que se van enamorando y de una manera tan… tan hermosa que es imposible no suspirar a pesar de las situaciones por las que están pasando. Veremos que Blanca no es la damisela en apuros, sino es todo lo contrario, y conoceremos a un Yi, o más bien unos Yakuzas que aunque mantienen tradiciones, se han adaptado a la nueva modernidad del mundo y es una mezcla o explicación que la autora ha logrado marcar… reflejar muy bien. Sin duda se nota el trabajo de documentación que ha tenido para elaborar esta historia, que aunque tiene más peso el romance, logra enseñarnos muy bien esa cultura japonesa en esta historia.
Amor, venganza, traición, amistades y más son cosas que encontraremos en esta historia que nos cuenta la vida de dos personajes tan diferentes pero que conectan de tal manera que es preciosos, conoceremos más a los Yakuzas y sus tradiciones, algunas leyendas e historia y dos personajes principales muy fuertes y bien estructurados. Una novela con mucha acción, con mucha empatía y un sinnúmero de emociones que no podrás detener la lectura hasta terminarla.
Sin duda un buen cierre para esta trilogía y fue un placer y gustazo conocer la pluma de Katy Molina con estas novelas que se atrevió a contar unos retellings muy diferentes de cuentos de hadas tradicionales, logró ponerlos en vecindarios peligrosos y aun así conseguir esos amores que gustan.
Con una pluma ligera, sencilla, amena, escenarios y descripciones bien elaboradas y un buen perfilado de los personajes, que solo me queda recomendar que lean los tres libros de esta serie y no se arrepentirán. Muy buenas historias!!!