Una tierra maldita, una mujer dispuesta a luchar por el poder,
un gran misterio que debe salir a la luz.
Año 1889, La Rioja. Hay quien dice que una maldición se ciñe sobre los viñedos, secos desde hace años, de la finca Las Urracas. Mientras las grandes bodegas de la región comienzan su edad dorada, Gloria -la joven hija del propietario- languidece en la vieja mansión familiar, viendo aproximarse otro otoño sin cosecha.
Sometida a la autoridad de una tía cruel y un padre ausente, Gloria verá cambiar su vida de un día para otro cuando tenga que ponerse al frente del negocio familiar. Será entonces cuando comience una larga batalla que la enfrentará a los bodegueros y caciques locales, que no conciben tener como rival a una mujer. Y menos a una que pone en duda sus viejos privilegios.
Con la ayuda de sus hermanas, Gloria luchará por recuperar el esplendor de sus viñedos, al tiempo que se adentra en los secretos que esconden las habitaciones cerradas y los campos muertos de Las Urracas. Bajo la sombra de una maldición que solo al final sabremos si es cierta, las mujeres de esta novela lucharán, sin miedo a nada ni a nadie, por el poder que les pertenece.
Opinión personalLas hijas de la tierra es una historia protagonizada por mujeres que tienen que luchar por abrirse un lugar en una sociedad que les niega casi todo por cuestión de género.
La narrativa de la autora nos hace adentrarnos en la historia desde las primeras páginas. Consigue que nos vaya calando y empaticemos rápidamente con las tres hermanas protagonistas.
Esta novela está en mi lista de recomendaciones y estoy deseando que haya más libros de la autora para seguir disfrutando de su prosa.
Sobre la autora