Reseña: Leah a destiempo

Por Estherymab
¡Hola a todos y todas! Hoy les traigo el spin-off de Yo, Simon, Homo Sapiens. Si aun no lo leen, pueden pasar por mi reseña haciendo click acá para ese empujoncito que están esperando.

Título: Leah a destiempo
Título Original: Leah on the offbeat
Autor: Becky Albertalli
Editorial: Urano (sello Puck)
Páginas: 317

ISBN: 978-987-4132-08-6
Cuando se trata de tocar la batería, Leah Burke suele tener buen ritmo, el tiempo es su especialidad. Pero en su vida personal las cosas suelen ir a destiempo.Leah, una anomalía en su grupo de amigos, es la hija de una joven madre soltera, y su vida es sin dudas la menos privilegiada. Le encanta dibujar pero se siente demasiado cohibida para mostrar sus creaciones. Y a pesar de que su madre sabe que es bisexual, ella aún no ha podido reunir el coraje para contárselo a sus amigos, ni siquiera a Simon, su mejor amigo abiertamente gay.De modo que Leah, en realidad, no sabe qué hacer cuando su sólido grupo de amigos comienza a resquebrajarse de formas inesperadas. Con el baile de graduación y la universidad asomándose por el horizonte, la tensión crece cada vez más. Para ella es difícil dar con la nota correcta cuando la gente que quiere está sumida en conflictos, en especial, cuando se da cuenta de que tal vez ame a una personas más de lo que nunca hubiese llegado a imaginar
¡Muchas gracias a Ediciones Urano por el ejemplar!
ESTA RESEÑA CONTIENE SPOILERS DE YO, SIMON HOMO SAPIENS.SI NO LEYERON EL PRIMER LIBRO NO ES RECOMENDABLE SEGUIR LEYENDONo les puedo explicar lo difícil que siento que va a hacer reseñar este libro, un libro que empecé sinceramente con pocas expectativas, con ganas de enterarme un poquito más del después de Bram y Simon, esta vez como una side couple, y de paso conocer un poquito más a Leah. Un libro que fue una experiencia nueva para mí, una experiencia linda y rara que hace tiempo que no vivía.Todos se acordarán de Simon, este chico que nos conquistó en Yo, Simon, Homo Sapiens con sus mails, sus miedos, sus chistes y ojos delineados. También de Bram y de cómo nos spoilearon en la película en el minuto uno que él era Blue -nunca se los voy a perdonar-. Pero lo importante es, ¿se acuerdan de Leah? Esta es su historia.Una vez más, Becky Albertalli se adentra en los conflictos de la adolescencia de los que muy pocos hablan: la baja autoestima, la bisexualidad, el racismo, el miedo a ser juzgados y como este mismo miedo nos lleva a juzgarnos a nosotros mismos mucho más de lo que cualquier otro lo haría. Con un humor inteligente que te hace sonreír casi sin darte cuenta en cada página, escenas realistas que te hacen sentirte identificado por las confusiones, los momentos incómodos, las dudas, llantos y risas, y personajes tan reales que no podés creer que hayan salido de su escritura, de su cabeza, te adentra en la historia de Leah. Una chica tan asustada de aceptarse a ella misma, no solo con respecto a su sexualidad sino también con su cuerpo, sus talentos, cada aspecto en su forma de ser.La autora logra plasmar cada escena, cada conflicto con tal realismo y empatía que logró que estuviera metida en la historia por completo desde el minuto uno. Logró que me sienta completamente identificada con la protagonista y déjenme decirle que eso no es nada fácil. Logró que me sienta triste por no haber encontrado este libro antes, logró que deseara que mi yo de hace unos años lo hubiera leído y se hubiera sentido escuchada, acompañada. Aunque debo decir que este libro me escuchó y me acompañó ahora también.Esta vez nos centramos en el tema de la bisexualidad. No sé qué pensarán ustedes pero lo sentí tan bien tratado, desde la omisión del tema desde el principio del libro que hacía Leah en su cabeza, ese misterio falso que generá aunque todos sabemos que está ahí aunque ella no lo diga ni aunque sea en su mente, ese miedo a decirlo aunque sepa que la gente de su entorno no la juzgaría, sus inseguridades. Es tan diferente a lo que vimos con Simon en el primer libro y me parece perfecto.El tema de la autoestima DIOS USTEDES LEYERON EL CAPÍTULO QUE VA A COMPRAR EL VISTIDO PARA EL BAILE? tenía ganas de escribir con marcador indeleble en toda las páginas RELATABLE. Leah es insegura en todos los aspectos y la autora plasma tan bien el hecho de que eso, la forma en la que ella se siente, la tira para abajo, la lleva a buscar una perfección imposible, la aleja de su entorno. Y todo esto está narrado de una forma tan realista, tan sutil que forman al personaje de una manera perfecta.Si no recuerdo mal, me volvió a pasar lo mismo que con Yo, Simon, Homo Sapiens. La trama y los conflictos pasan a un segundo plano cuando los verdaderos conflictos que me importaron más durante la lectura son los que toman lugar en la cabeza de la protagonista y cómo esto la lleva a actuar con su entorno y las personas que la rodean. Me parece un aspecto muy interesante y también las conclusiones a las que se llega, las palabras de aliento si se quiere de otros personajes son hermosas y de verdad quiero quedarme con todo eso, quiero ser yo la receptora de todo eso también.Seguir escribiendo sería entrar mucho en detalles, aunque sí hay cosas que me gustaría mencionar como la relación de Leah con la madre, lo idiota que es Nick (NO LO BANCO) y que puede ser que yo también me haya enamorado un poquitito de Abby Suso pero creo que quedó claro que nadie puede resistir a sus encantos. SÍ, HUBO PARTECITAS DE SIMON Y BRAM QUE SON LO MÁS HERMOSO DEL MUNDO, NO PUEDO AMARLOS TANTO.Así que nada. Si les gustó el primer libro, les aseguro que a este lo van a amar. La escritura de la escritura sigue siendo ligera, divertida y muy fácil de leer. Si no leyeron el primer libro, además de que les spoileé quién es Blue, tendrían que darle una oportunidad porque tiene una esencia hermosa, es muy ligero y un muy buen primer acercamiento a los libros de temática LGBT si nunca se acercaron antes.RECORDATORIO SUPER IMPORTANTE: Becky Albertalli va a estar acá en Buenos Aires para el Feria Internacional del Libro el sábado 4 de mayo a las 16hs. Va a haber charla y firma y no se la pueden perder!!!Gracias por leerme, Ailén.