A los redactores de El Templo de las Mil Puertas nos encanta estar al día de las novedades, reseñando nuevos títulos que apenas acaban de salir de imprenta, pero eso no significa que no sintamos devoción por los clásicos. John Steinbeck, escritor norteamericano del siglo XX, se ha ganado a pulso el título de clásico moderno.
Su bibliografía es tan extensa y variada que ni los críticos se ponen de acuerdo en cuál es su mejor obra. Algunos dicen que Las uvas de la ira, novela que recoge las miserias de los Joad en la Gran Depresión. Otros prefieren La perla, donde Steinbeck abandonó temporalmente el mítico escenario de Salinas para recoger testimonio de las injusticias de América Latina. Sin embargo, si hay un título que sirve de iniciación en la obra de este célebre autor, ese es sin duda De ratones y hombres.
Esta novela, breve en comparación con otros trabajos del escritor, sigue el viaje en busca de trabajo de dos jornaleros cubiertos de desgracias, Lennie y George. Los dos amigos son tan opuestos como inseparables: George es el cabecilla, inteligente e ingenioso, mientras que Lennie es un bruto poco racional. Los dos forman un tándem que busca cualquier lugar donde trabajar mientras la crisis económica asola los Estados Unidos de los años veinte. La llegada a un nuevo terreno de trabajo cambiará las vidas de la pareja para siempre. Ellos sólo quieren ganar unos dólares con el sudor de su frente, pero los instintos aflorarán cuando menos lo esperen...
De ratones y hombres, que en un principio puede parecer un texto menor en comparación con otros trabajos de John Steinbeck, no renuncia al estilo cuidado y preciso, exento de florituras, tan característico del autor. A pesar de que la historia no cuenta con las tramas habituales de su bibliografía, su fuerte quizá sea la profundización psicológica de los personajes, que se van desarrollando a medida que pasan las páginas. De ratones y hombres nos engaña con una historia aparentemente plana que sabe girar y crear tensión en el momento crucial, cuando no nos damos cuenta de que el libro nos ha enganchado por completo, con un final de los que quitan el aliento capaz de compensar el principio.
Seguro que De ratones y hombres no es el mejor libro de Steinbeck, pero sí es la novela con la que muchos jóvenes, especialmente en Norteamérica, se inician en este autor. Es un clásico de las aulas de instituto y un imprescindible en cualquier biblioteca del siglo XX.