Reseña literaria La Emperatriz de los Etéreos, Laura Gallego García

Por Eltemplodelasmilpuertas @Templo_Revista
Editorial Alfaguara

El último libro de Laura Gallego García se desarrolla en un mundo de hielo y nieve, donde las personas se ven obligadas a vivir en cuevas para protegerse del frío. A pesar de que los habitantes de estas cuevas viven casi totalmente aislados del exterior, conocen leyendas de un Reino Etéreo, igual de frío pero más perfecto y de un mundo más cálido, con grandes animales y noches estrelladas.

La protagonista, Bipa, es una chica muy práctica, con una personalidad apropiada para la vida en las cuevas. Siempre dice lo que piensa, especialmente cuando se trata de señalar la poca utilidad de los objetos que le enseña Aer, el chico soñador que tiene siempre la cabeza en las nubes. A lo largo del libro los protagonistas emprenden un viaje en busca de un mundo mejor, ya sea más cálido o más perfecto. Un viaje que el lector vive a través de Bipa y que nos enseña las maravillas que puede haber en los lugares que no conocemos y a la vez las que dejamos atrás, en nuestro hogar.

Una vez más, Laura Gallego nos sorprende con un tipo de fantasía diferente al resto. La historia es sencilla y lineal, fácil de seguir y de lectura rápida. En algunos fragmentos el viaje se vuelve demasiado duro y largo lo que hace que la narración sea quizá más lenta de lo que debiera aunque produce una sensación muy ajustada al contenido. En cuanto al argumento, es muy interesante la comparación entre el valor que se da al mundo exterior y al interior, a lo ajeno y lo conocido, a la perfección del frío hielo y el calor del hogar.

El primer párrafo del libro es, en mi opinión, lo más bonito y lo más sublime en cuanto a la prosa. La imagen que evoca, el ritmo del relato, las palabras escogidas... Merece la pena leerlo después de acabado el libro, porque es aún más perfecto cuando ya conocemos la historia y el ambiente en que viven los personajes. La calidad de la narración va descendiendo en las siguientes líneas y se pierde en los diálogos, pero aún así nos deja con un texto claro, sencillo, rico en imágenes y limpio de muletillas o frases recurrentes.

Es, en resumen, un libro bonito, con una edición preciosa, ideal para leer en Navidad, con nuestra familia dentro de casa y el frío, fuera.