Hubo un tiempo en el que Will era un chico normal, alegre y divertido. Un tiempo en el que tenía amigos con los que disfrutaba de los días de sol sin ver en ellos razas o colores de piel, sin desamores. Pero ese tiempo quedó atrás cuando su madre, sin motivo aparente, se suicidó lanzándose a las frías aguas del río. Ahora Will se pasa la mayor parte del tiempo solo, en silencio e intentando asimilar la realidad que lo rodea con su sarcástica mirada; intentando comprender por qué hay personas que aparecen de la nada y lo observan como si lo conocieran. Hombres y mujeres extraños, con las miradas vacías y oscuras, que lo saludan o intentan entablar conversación con él, que lo persiguen de noche y de día y a quienes escucha gritar en sueños.
Y entonces, un día, Will es testigo de un cruento asesinato perpetrado en mitad de la calle y en el que se ve involucrado su antiguo amigo de la infancia, Yan. Desde ese momento, además de lidiar con los “raros” que lo persiguen, y que cada vez se atreven a acercarse más a él, deberá dejar de lado su habitual hermetismo para elegir un bando dentro de la guerra política y de inmigración que se está produciendo, de manera cada vez más subversiva, a su alrededor.
Gemma Malley es mundialmente conocida por su popular distopía La declaración (publicada por Salamandra) y por sus continuaciiones, La resistencia y El legado (que no han llegado todavía a nuestro país). Al igual que en sus anteriores novelas, la autora inglesa dota a este nuevo libro de una ambientación sobresaliente, a ratos gris, a ratos oscura, que va calando en los lectores tanto como la propia trama o los magníficos personajes.
Contada en primera persona con una prosa clara y natural y sin dejar de lado un argumento sugerente repleto de misterio, fantasía y, cómo no, amor, Malley nos habla de un futuro que estamos construyendo sin darnos cuenta, donde el odio y los intereses personales han ganado terreno al amor por el prójimo y al respeto humano.
En definitiva, una novela que gustará a jóvenes y adultos, que nos habla del presente y del porvenir, de nuestro destino y de las oportunidades que la vida nos ofrece para enfrentarnos a él y superarlo… incluso después de la muerte. Esperamos que alguna editorial sea lo suficientemente valiente como para atreverse a publicar The returners tarde o temprano. Estamos seguros de que se haría un lugar en las estanterías de aquellos que busquen una trama a caballo entre la realidad y la ficción... y sin vampiros.