Jossy Loes
¡Maldito karma!
«Si sabes cómo soy, ¿para qué me invitas?», es más o menos lo que solía decirle a mi hermano cada vez que me hablaba de su boda con Ginger. Admito que me divertía viéndola sudar cuando soltaba lo que pensaba, pero nada haría cambiar mi opinión sobre los bodorrios y menos al enterarme de que Isabella González estaba metida en esa movida. Llegó el momento de devolvérsela y de los líos… Sí, en eso no os equivocáis.
Un liante, de esos que te hacen estremecer hasta el dedo chico del pie, y una mujer que lo sabe e intentará que no afecte en su trabajo cueste lo que cueste. Si creéis que la madrina y el padrino no son tan importantes en una boda, es mejor que os vistáis de etiqueta porque sois los invitados estrella de Madrina en Alquiler.
Un Chick Lit divertido en toda la extensión de la palabra, Bella tiene cada ocurrencia, claro no como la tía Cleta que es todo un personajazo y casi opaca a nuestra bella protagonista, bueno pues resulta que ella, Bella tiene un pasado complicado con Leo algo que cuando se lo vuelve encontrar gracias a la próxima boda a la que le han contratado y verlos juntos es que la novela subirá una gran cantidad de grados por encima de lo normal.
Sin duda Ginger es y sus pequeñas excentricidades no solo desesperan a la organizadora de bodas, traerá a su vida a alguien del pasado, uno que no ha podido olvidar.
Con una pluma ligera, divertida, amena y cada ocurrencia, sumando el buen perfilado de los personajes, es una lectura que se devora rápidamente y te deja con una sonrisa tonta en los labios.
Quizá para mi gusto hay mucho, pero dado que se presta por las situaciones, los personajes y la trama, hay mucha tensión sexual, mucho tira y afloja de nuestros protas, es que hacen una lectura muy entretenida y si vemos el círculo de personajes que los rodean, hacen que cada momento sea único.
Dos personajes que echan fuego y pasión, ella fuerte, decidida y luchadora que ha decidido crear Madrina En Alquiler para ayudar a todas esas novias desesperadas que no necesitan estresarse más de la cuenta para su gran día, junto a su hermana y sus amigas lo han creado, por otra parte tenemos a Leo que ah con este hombre, que tiene cada ocurrencia, no tiene filtro para hablar, es atractivo y lo sabe, lo que hace que su ego sea un pelín exagerado, pero sin duda lo vale.
Cuando en una boda los que comienzan a brillar no son precisamente los novios, sin duda habrá grandes problemas, ahora sí depende quien lo vea, pueden ser catastróficos o muy divertidos.
Buena lectura, entretenida, divertida y que engancha desde el inicio.