Adam Silvera
El Bronx, Nueva York, en un futuro no muy lejano… Aaron Soto, de dieciséis años, lucha por encontrar la felicidad a pesar de las cicatrices que arrastra, tanto físicas como emocionales: el suicidio de su padre, su propio intento fallido de abandonar este mundo, una vida de necesidades y, para colmo, la inquietante atracción que siente por Thomas, su nuevo y ambiguo amigo… Con lo fácil sería su vida si pudiera borrar las experiencias acaecidas en estos últimos tiempos y empezar de cero junto a su novia, Genevieve, y sus camaradas de siempre…
Afortunadamente, en el vecindario existe una sede del instituto Leteo, que ofrece la posibilidad de erradicar los recuerdos difíciles con un tratamiento revolucionario. Aaaron está dispuesto a olvidar a cualquier precio, sin saber que la felicidad y la infelicidad son dos caras de la misma moneda… y que el precio del olvido puedes ser demasiado alto.
Una novela que rompe moldes, con un toque futurista, que nos arrastra por una montaña rusa de sensaciones y preguntas, no todas de fácil respuesta. Una historia original y valiente sobre el olvido que ningún lector podrá olvidar.
La historia comienza con Aaron, un chico que la tiene muy jodi*** a pesar de su edad ha tenido que pasar por mucho, es pobre (en extremo), y a parte tiene el trauma que él fue quien encontró el cuerpo de su padre cuando se suicidó, obviamente esto le trae demasiados problemas, que él incluso atenta con su vida y en sus brazos ha quedado la huella de una manera hasta cruel que le recuerda que hizo por la forma de las cicatrices que tiene, y bueno, por si esta depresión que carga no fuera suficiente, comienza a tener cierta atracción por su amigo, y de solo pensar lo que pasaría si esto sale a la luz pues lo sume en una depresión más grande, por esos, aquellos anuncios que había leí de el Instituto Leteo, que promete borrar los recuerdos que tu no quieres recordar, crearte unos felices, para conseguir esa felicidad que nunca ha tenido.
Como ya comencé diciendo, tiene un inicio muy lento, incluso me desesperaba mucho nuestro prota que quería entrar a darle unas cachetadas, era exasperante y dramático a más no poder, aparte que el tema de la homosexualidad me parece que en este caso va más hacia el morbo y no tanto para ayudar a alentar a los lectores jovenes que es el publico al que va esta lectura, creo que el lugar de alentarnos de mostrarle un mundo donde el bullying no tienen cabida y es algo que debería verse como algo normal, les mete más miedo… o así lo veo yo, me gusta que haya novelas que tengan como base LGTB pero que dejen un buen mensaje no solo miedos… pues Aaron era inseguro, inmaduro, e incluso hasta tonto, pero el autor logró cambiar esta visión pasando la mitad de la novela e hizo que lo terminara admirando, que sufriera un poco con él y lo comprendiera… Si toda la historia hubiera estado contada de esta manera, sin duda hubiera sido un libro espectacular, pero como no fue así…
Tiene puntos buenos, realistas, duros, algunos interesantes que no me esperaba, pero la desigualdad de narración hizo una lectura lenta, en ocasiones aburrida, a pesar de que la pluma del autor es fácil de leer y consigue que en general no la detengas.