Hace tiempo sentía dolores en el cuello derivados de mi postura al trabajar y planificaba el poder hacer ejercicio regularmente, pero... regularmente, no encontraba tiempo y fracasaba. No me servía el tomar la decisión una y otra vez. Fue cuando conseguí poner mis motivaciones en orden, cuando conseguí reservar el tiempo necesario y me encontré haciendo ejercicio una semana tras otra.
El aprendizaje también es por lo general más motivacional. Cuando profundizamos en algo que nos llama la atención (especialmente una habilidad) nos sentimos más animados para hacer más cosas.
¿Has tomado la decisión de aprender a cambiar hábitos que no te gustan para mejorar tu salud este año? ¿Es una resolución o tienes una motivación clara, o quizás, ambas cosas?
¡Con tu coach de salud tienes una oportunidad para descubrirlo!.