Reto #12sininternet…en una tarde cualquiera

Por Lai Pv @laicapi

Hace unos días, María de Viviendo con Peques, proponía por twitter que nos uniéramos al reto #12sininternet. El domingo 31 de mayo, 12 sin internet. Me uní sin pensarlo.

Hacía tiempo que quería hacer un día “sin conexiones” y esta fue la excusa perfecta. Al contárselo al padre de las criaturas se apuntó también, así que si preguntarles apuntamos también a las niñas: ese domingo no habría internet en teléfono, ni whatsapp, ni youtube, ni netflix, ni ipad, ni juegos en el teléfono. 12 horas de desintoxicación.

El domingo empezó con la pequeña de las terremoto despertando poco antes de las 7. Yo tenía intención de no usar el teléfono desde que me acostara la noche anterior hasta las 21.30 de la noche, pero la verdad, ese ratito lo aproveché. De 7 a 8 me puse un poco al día y después…”modo off” Ese día en Chile se celebraba el Dia del Patrimonio Cultural. Como no teníamos folletos de los eventos del día, y no teníamos internet, al final elegimos de las propuestas la que recordábamos bien…esa podría ser la primera anécdota del día.

Las primeras horas se siente uno…raro. Yo tengo siempre el teléfono en el mismo lugar el fin de semana, apartado de donde solemos hacer vida, pero las primeras dos horas cuando pasaba cerca miraba de reojo si había parpadeo de notificaciones…hasta que recordaba que estaba sin internet. Esta imagen define esa sensación:

Pero es que el día dio para mucho, os lo cuento en imágenes…que para algo usamos el móvil ese Domingo:

Para aprovechar el Dia del Patrimonio nos fuimos a conocer la Escuela Militar. Es algo que me causa mucha curiosidad pues me choca que recintos militares tengan tanta presencia en la ciudad hoy en día, y tenía ganas de saber cómo era por dentro. ¿Y vaya escuela! Piscina Olimpica, cancha de baloncesto, de voleyball, de futbol, de atletismo, de hipica, de rugby…no les faltaba de nada!! Y biblioteca, comedores por “niveles” de rango, me quedé impresionada. No pudimos verlo todo porque como buen domingo, nos costó salir de casa, pero aquí una pequeña muestra:

Dia del Patrimonio: Escuela Militar

La piscina la verdad, verla tan temperada y vacía, me dieron unas ganas de tirarme al agua! (eso sí, los cambiadores y las duchas están fuera y con el frío que hacía, la salida no hubiera molado mucho jaja)

Además, en la escuela militar había una exhibición de coches y motos antiguas. Algunos por distancia no pude hacerles foto pero había auténticas maravillas! Aquí una pequeña muestra, pues los vimos cuando ya se iban (he mencionado ya que llegamos tarde?)

Patrimonio móvil: coches y motos antiguos

Además de esta salida, nos dió tiempo de:

Aprovechar los nuevos materiales para aprender de punto de cruz

(se me da muy mal, me costó un mundo pillarle el truco a esta miniatura para niños)

y, lo que nos ocupó la mayor parte del día y nos entretuvo más es que hicimos una casita. Teníamos los palos de plástico de una casa que ya tenía el cobertor roto, así que con una sábana nos pusimos manos a la obra:

Aun nos faltan detalles como las ventanas y la entrada y, sobretodo, nos falta saber cómo conseguir que se le vaya el olor a la témpera (alguien tiene algún tip?) Porque queda monisima y a las niñas les encanta pero si la dejas dentro de casa la casa huele fatal (y eso que está pintada con tempera para niños)

Además, hicimos puzzles, leímos, reciclamos (aquí reciclar requiere darse un paseito hasta el punto limpio), nos disfrazamos, dibujamos y hasta me dio tiempo a terminar el libro de Laura Gutman que estaba leyendo, y que recomiendo 100%:

A las 21.31 minutos el padre de las criaturas, con ambas niñas dormidas (lo que agota no tener internet!!), ya estaba conectado de nuevo. Y yo poco después también, en una competencia por ver “qué había pasado” en nuestros mundos virtuales en esas 12 horas. Pero la verdad, lo vimos un poco y después nos aburrimos…

Hasta aquí esta iniciativa que tengo ganas de convertir en costumbre familiar, almenos un día al mes. La iniciativa, como decía arriba, fue una convocatoria de Viviendo con peques, y aquí os dejo las respuestas a las preguntas que nos hacía María:

1. ¿Qué te ha parecido este reto?

Una super buena idea!!! Llevaba tiempo pensando en hacer un día sin internet, y este reto ha sido el empujoncito que me faltaba. 

2. ¿Has conseguido cumplirlo entero?

Sí. La verdad tenía pensado cumplirlo desde que me levantara hasta la hora marcada por la noche, pero la pequeña terremoto se despertó antes de las 7, así que aproveché un ratito por la mañana. 

3. ¿Se ha unido algún familiar o persona cercana?

sí, en casa se unió el padre de las criaturas…y las niñas por extensión. No hubo youtube, ni netflix, ni ipad, ni juegos en el teléfono. Eso sí, dejamos la tele, que aquí ahora es invierno y para el rato de la mañana y la noche la pusimos un ratito. 

4. Déjanos tres palabras que describan cómo te has sentido durante el reto

desacostumbrada, creativa, liberada

5. ¿Repetirías?

Por supuesto, estoy pensando en instaurarlo un domingo al mes!

6. ¿Quieres contarnos alguna anécdota o algo más que te apetezca añadir?

como anécdota te diria que las primeras veces que pasaba cerca de donde tenía el teléfono (que fue mi cámara del día) no podía evitar mirar si parpadeaba la pantalla…hasta que recordaba que estaba “internet off”. Después ya me olvidé. 

Y otra cosa que notamos, es que el día se pasa mucho más lento! Hicimos tantas y tantas cosas en un solo día!

Os animo a probar este reto y desconectaros un día. Quizá dé una sensación rara al principio, pero sienta bien. El día dió para mucho, nos tuvimos que estrujar la cabeza para entretenernos porque el día pasó mucho más lento, pero estuvimos todo el rato interactuando juntos, lo cual se agradece. Lo recomiendo!