Reto pasados los 30 #roadtoberlín

Por Patriciaderosas @derosasybaobabs

Este post está dedicado a las mujeres imperfectas. A todas aquellas que alargáis un poco la siesta de los niños para poder prolongar la vuestra en algunos días terribles. Aquellas que coméis chocolate a escondidas pero después obligáis a la familia a ponerse a dieta para que os ayuden en el propósito. Aquellas que pasáis por momentos de inseguridad en los que parece que todo el mundo es más capaz que vosotras. Aquellas que sois capaces de admitir en un momento dado que vuestro trabajo no os llena. Este post, y esta sección, está dedicado a las mujeres imperfectas y reales que hacen mil cosas mal pero de vez en cuando, dan con algo que se les da bien. Y renacen, y crecen y se hacen grandes. Mujeres con sueños y con retos.

Y sobre todo, mujeres que tienen claro quienes son.

Hace casi tres años nació De rosas y baobabs. Era algo pendiente, una necesidad personal de expresar, de contar, de acercar. Un proyecto sin grandes miras ni claros propósitos que se ha convertido en una parte fundamental de mi vida y mi trabajo. No tengo ni idea de SEO, ni de estrategia de redes, y a día de hoy sigo peleándome con wordpress casi a diario,  pero sí sé que cuando crees en algo puedes hacer que sea posible. En el camino decidí que necesitaba libertad. Libertad de escribir cuando quisiera y de lo que quisiera. Decidí que me encantan las bodas pero que no hablaría de ellas, salvo las mías. Decidí que mi blog tendría algo personal, pero sólo un poco y que me guardaría para mi el resto. Tomé muchas decisiones y siempre, siempre, siempre conté con el apoyo de mis amigas.

Mi reto fue y es éste. Crear algo de la nada que, por pequeño que fuera, tuviera mi sello.

Por alguna razón, cuando pasas los 30 te replanteas cosas. Te das cuenta de que te presionas más de lo normal, que lo que antes te apasionaba, ahora te aburre, que te exiges en exceso, que hay una parte de ti que ni siquiera tú conoces y que quieres hacerlo. Cuando rondas los 35 necesitas cumplir un propósito, porque ves que la vida está pasando demasiado rápido y no te has dado ni cuenta.

En la Universidad conocí a Natalia. Un día apareció en mi habitación con un bote de leche en polvo y muchas ganas de hablar. Yo puse el café y una canción de Silvio y Natalia se quedó a vivir. El destino hizo que yo acabara viviendo en su ciudad natal varios años después.

Natalia ha creado su propio reto, y yo voy a apoyarle desde aquí como ella lo ha hecho estos años. Dentro de cuatro meses correrá el maratón de Berlín.

Cuarenta y dos kilómetros de una mujer normal como otras tantas que trabaja, que educa, que más que correr vuela y que ha tardado casi tres años en conseguir disfrutar de tiempo para ella desde que fue madre.

Os iré contando su evolución, sus buenos y malos días. Porque cuando las mujeres imperfectas nos proponemos algo, nos encontramos con muchas piedras en el camino.

Pero nos levantamos y seguimos. Porque nuestra mochila está cargada de experiencias, de proyectos, de sueños y de pequeñas ambiciones que nos hacen fuertes.

Comenzamos el reto. Para Natalia comenzó hace unos meses, pero nosotras le seguimos desde ya. Porque da igual cuál sea tu reto, el ejemplo de otras mujeres que  vieron que a partir de los 30 te puedes comer el mundo será nuestro precedente.

Road to Berlín. Cuatro meses por delante.

Ánimo Nani.

patricia