"Para ser sincero, creo que esto es sólo un cliché", contestó Ricciardo a La Gazzetta dello Sport cuando el medio le preguntó si sería su sueño terminar pilotar un monoplaza de la Scuderia.
"Está claro que algunos pilotos tienen este sueño", admitió, "pero creo que está relacionado con el hecho de que sus padres amaban Ferrari por su gran historia y el patrimonio cultural".
"Mi ADN italiano sin duda sale en mi forma de comer", explicó Ricciardo con su habitual sonrisa. "Me encanta la comida italiana, especialmente cuando estoy entrenando duro y puedo comer adecuadamente".
Así pues, en lugar de soñar con Ferrari, Ricciardo declaró a la agencia de noticias italiana Adnkronos que él es más que disfrutar de su primer año con el equipo Red Bull. "Estaba esperando un año como éste", dijo. "Sabía que si lo hacía todo bien, era posible luchar en igualdad de condiciones con Sebastian (Vettel)".
"Creo que he empezado el año muy bien, sé que el objetivo es sólo seguir haciendo lo que estoy haciendo", añadió el australiano.
En cuanto al siempre controvertido formato de la actual fórmula 1, Ricciardo dijo que si bien algunos han sido muy críticos, él particularmente está disfrutando 2014.
"No se puede complacer a todo el mundo", dijo. "Si alguien piensa que es aburrido, tienes que entenderlo. Pero creo que es un deporte muy agradable y emocionante, y me encanta ver el entusiasmo de los aficionados en los Grandes Premios", insistió Ricciardo.