Aunque está un paso por delante de sus probables rivales por el título, Sebastian Vettel y Lewis Hamilton, Nico Rosberg ha insistido en que no va a precipitarse. Y es que las nueve victorias consecutivas del piloto de Red Bull llegaron a su fin en Melbourne, donde Rosberg ganó con su Mercedes con casi medio minuto de ventaja en el comienzo de una nueva era de la Fórmula 1.
"Ahora sé muy bien cómo debía sentirse Sebastian el año pasado cuando ganaba por 30 segundos", dijo Rosberg. "Saber que puedo seguir luchando por poles y victorias es genial", añadió en declaraciones a Sport Bild.
"Nunca se puede descartar a Red Bull. Casi habría apostado mi casa después de los testsa que todavía tendrían problemas (en Melbourne), pero eran más fuertes de lo que esperábamos", dijo el piloto.
A pesar de que admitió que le gusta el sabor de ser el más rápido de la Fórmula 1, Rosberg advirtió: "Esto muestra que no podemos dormirnos".
Un problema al que puede enfrentarse el alemán es una tensa batalla con su propio compañero de equipo en Mercedes, Hamilton.
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"Pero también soy consciente de que cuanto más éxito tengamos, más complicada va a ser nuestra relación", reconoció sobre su relación con el británico.
"No somos mejores amigos, pero estamos bien", admitió Rosberg. Y es que la relación entre ambos, tanto a nivel personal como competitivo, se remonta a su niñez.
La F1.es