Salchichas con pimiento rojo, amarillo, champiñones y piña en salsa de ostras

Por Carmenrosa @MicocinaCR


Quienes suelen pasar por Mi cocina virtual están acostumbrados a ver platos orientales, o con influencias orientales; ya conocen ésa afinidad que tenemos en casa por la cocina ya sea china, tailandesa, japonesa e hindú, comidas en definitiva de exóticos sabores.   No es nada nuevo para mi familia, lo que, para muchos occidentales que aún hoy en día no se atreven a experimentar, es habitual y normal en mis fogones desde hace muchos, muchos años.
Cuanto más tiempo pasa, descubro que la cocina española tiene muchísimo en común con ellas, si analizamos una gran mayoria de nuestras recetas tradicionales, tienen profundas influencias de esas cocinas lejanas, que actualmente, aunque parezca insólito e increíble poseen ingredientes que se usaban en nuestra península hace milenios, concretamente me refiero al famoso y desaparecido GARUM que los romanos consumían como aderezo, siendo Málaga uno de los lugares donde “fabricaban” esta delicatesen.    Es en china donde actualmente lo usan en sus platos con más frecuencia, me refiero exactamente en ésta ocasión a la salsa de pescado y la salsa de ostras, la misma base, incluso la misma técnica en el caso de la salsa de pescado que el antiguo garum hispano-romano. La salsa de ostras concretamente es una salsa viscosa, densa y oscura, se elabora con las esencias de las ostras en salazón, teniendo un intenso aroma salino, con un potente sabor umami.Umami, en japonés significa algo así como “delicioso”; es el nombre que le damos al quinto sabor, quizás el menos conocido de los demás: salado, dulce, ácido y amargo.  
Un sabor que está presente de forma natural en infinidad de alimentos: quesos curados, jamón serrano, anchoas en salazón, salsa de soja, de pescado, en el alga kombu, en espárragos, en los tomates y en muchas frutas maduras.
Suelo comprar los productos orientales en una tienda en Torremolinos, de mi total confianza, “Asia alimentación” y hay muchos supermercados “chinos” en la costa malagueña. Por lo que en mi alacena suelo tener casi siempre los ingredientes necesarios para aderezar dándoles incluso a los ingredientes tradicionales un “toque” un tanto más exótico, buscando ése sabor excepcional: el umami.En ésta ocasión lo he usado para “aderezar” unas riquísimas salchichas de cerdo, que habitualmente suelo preparar encebolladas encebolladas (AQUI les enlazo a la receta)

¿Como la hice?
Colocar las salchichas en un bol y echar unas dos cucharadas de salsa de soja junto con un ajo de diente machacado y una pizca de jengibre en polvo , remover y dejarlas macerar unos quince minutos.Pasado éste tiempo, escurrir y reservar las salchichas. Esta salsa de soja que uso, es japonesa, para mi gusto mucho más suave y delicada.... Mientras, cortar media cebolla blanca, medio pimiento rojo, medio amarillo de forma longitudinal; dos o tres champiñones en trozos gruesos y cuatro rodajas de piña en trocitos pequeños. En una sartén o wok, echar unas dos o tres cucharadas de aceite aceite de oliva y pochar la cebolla hasta que comience a dorar, añadir las salchichas y los pimientos, removiendo todo el conjunto durante unos minutos (hasta que empiecen a dorar las salchichas).Añadir los champiñones y dejar un minuto que suelten el agua.Añadir los trozos de piña y dos cucharadas soperas de salsa de ostras, remover….y listo para emplatar.Espolvorear con cilantro (en su defecto perejil) picado.Acompañar con un arroz cocido tipo thai.
¡¡ Buen provecho !! Les animo una vez más a hacer platos variados, más diversos, menos monótona e incluso más divertida, viajando con el paladar, con los sabores y olores a países lejanos.