La verdad es que se trata de una preparación un poco atípica la que aquí traigo. En su día leí una receta de como preparar una "salsa boloñesa vegana" que no he conseguido recordad donde encontré. La preparación de base llevaba lentejas y, creo, también alubias. Con ese recuerdo como referencia y pensando en una salsa espesa (de las que llevan "trozos") para acompañar a la pasta o el arroz, me he puesto manos a la obra y he sacado esta elaboración, que queda a medio camino entre un pisto manchego y una salsa boloñesa (sin carne).
He utilizado lentejas pardinas y guisantes secos como legumbres, pero podían haber sido otras las usadas. La verdura también podía haber tenido variaciones o sustituciones con apio, hinojo u otras verduras. La parte más importante es la de las especias para dar aroma y sabor a la preparación. Muy importante el anís estrellado, que deja un toque impresionante (quizá un poco de matalauva molida podría sustituirlo). El laurel, el comino (imprescindible en preparaciones con legumbres) y la pimienta completan esta parte de realce del plato. Un pequeño secreto es usar miso blanco además de un buen caldo concentrado de verduras ecológicas como el que me suministran los amigos de Ecoalgrano.
Los pimientos de piquillo y el tomate de bote de Conservas Artesanales El Modesto son las más adecuadas para hacer esta salsa, junto a una buenas verduras frescas (cebolla, berenjena, calabacín y pimiento rojo). Para realzar el sabor de tomate utilizo un para cucharadas de tomate doble concentrado.
Muchos pequeños detalles para lograr un gran sabor. Claro que cada uno puede ajustar esos sabores a su propio gusto y así conseguir una salsa con una buena dosis de proteína vegetal que acompañe a una buena ración de cereal (con pasta, arroz o en una tostada de pan casero). Por su textura, puede ser utilizada como guarnición (del mismo modo que un pisto).
Se pueden usar legumbres envasadas ya cocidas. En ese caso, la cocción final se reducirá a unos 10 minutos.
Ingredientes:
- 100 g. de lenteja pardina.
- 100 g. de guisantes secos.
- 1 cebolla mediana.
- 1 berenjena mediana.
- 1 calabacín mediano.
- 1 pimiento rojo.
- 2 dientes de ajo.
- 4 pimientos de piquillo de Conservas El Modesto.
- 6 tomates de bote de Conservas El Modesto.
- 2 cucharadas de tomate doble concentrado.
- 1 anís estrellado.
- 1 hoja de laurel.
- 1/4 cucharita de comino molido.
- Pimienta molida, al gusto.
- Sal marina.
- Media pastilla de caldo vegetal concentrado ecológico de Ecoalgrano.
- 1 cuchara de miso blanco.
- 3 cucharas de aceite de oliva virgen extra.
- 200 ml. de agua.
Preparación:
- Poner a remojo durante un par de horas las lentejas y los guisantes. Enjuagar y escurrir.
- Limpiar y picar la verdura (cebolla, berenjena, calabacín y pimiento rojo), dejándola en cubos de medio centímetro.
- En una sartén profunda, calentar el aceite y saltear la cebolla a fuego suave. Cuando comience a transparentar la cebolla, agregar el resto de verduras picadas, además del ajo picado. Bajar el fuego y dejar que "sude" la verdura durante unos 15 minutos.
- Añadir el tomate en conserva y los pimientos de piquillo, troceados en cuadritos pequeños.
- A continuación poner el tomate concentrado, las especias (anís, laurel, pimienta y comino), el caldo concentrado y el miso. Salar y agregar el agua.
- Llevar a hervor y añadir las legumbres remojadas. Tapar y bajar el fuego casi al mínimo, conservando sólo un ligero borboteo.
- Cocinar a fuego muy lento durante unos 40 minutos, hasta que veamos que las legumbres quedan muy blandas. Se puede servir caliente, templada o fría y se conserva muy bien en el frigorífico durante un par de semanas dentro de una fiambrera o bote bien cerrado.