Dinero: Este año podemos incorporar a nuestra vida cotidiana un kakebo. La palabra kakebo proviene del japonés, y la suma de los tres caracteres con los que se escribe significa literalmente «libro de cuentas para la economía doméstica». Algo en apariencia tan sencillo es un auténtico fenómeno en Japón, donde millones de personas lo utilizan a diario para mantener a raya el gasto familiar y administrar hasta el último céntimo que sale y entra de casa.Su popularidad es tal que cada año se lanzan infinidad de modelos adaptados a todo tipo de público. Tanto si eres de letras como de ciencias, el kakebo es la herramienta por excelencia y la más sencilla para organizar tus cuentas domésticas, fácilmente adaptable a cada tipo de persona, con espacios para personalizarlo en función de tu rutina de consumo, ahorro y estilo de vida. Pon la cuentas claras cada principio de mes: resta a tus ingresos los gastos fijos y ten claro cuánto te queda en el monedero para ir tirando, márcate un objetivo de ahorro y empieza con buen pie. A medida que avancen las semanas, apunta en el diario de gastos todas tus compras, organizadas en cuatro categorías: supervivencia, ocio y vicio, cultura y extras. A final de mes, suma tu gastos semanales para obtener el total de gasto mensual y calcula cuánto has conseguido ahorrar.
Amor: Lo último y no menos interesante ni importante. Propongámonos en 2014 tratar mejor a quienes nos rodean y a nosotras mismas, querer y querernos. Y si en nuestra vida aún falta ese príncipe azul (o princesa), sacar lo mejor de nosotros mismos al escaparate porque este año puede ser el que aparezca!! ¡¡Feliz año nuevo!! Os deseo lo mejor para este año y os agradezco muchísimo el acompañarme en esta aventura un año más.