La salud mental nuevamente es una asignatura pendiente para nuestro país. Escasez de medios, eternas listas de espera y enfermedades que no paran de crecer.
Y es que acceder a un psicólogo o un psiquiatra de la Seguridad Social puede convertirse en una auténtica odisea.
Poniéndonos en contexto
Un alto número de pacientes con síntomas depresivos no buscan tratamiento porque creen que la ayuda no servirá y no llegará. Otros consultan a un médico sobre los síntomas físicos como el insomnio o la fatiga, recibiendo medicación para dichas dolencias, pero sin acceder a un tratamiento psicológico adecuado para detectar el origen del problema, señala un informe recientemente elaborado por una asociación que defiende la importancia de la salud mental en jóvenes y adultos.
La evidencia muestra que el acceso a cuidados de salud mental puede ser insuficiente incluso en países con ingresos altos, sanidad pública universal y sistemas comunitarios bien desarrollados.
Opiniones de psicólogos, psiquiatras y organismos públicos
Según Marta Ripoll, psicóloga y directora de la Federació Salut Mental Catalunya, "Los servicios de salud mental tienen que ser ágiles, accesibles y rápidos. Cuando una persona consulta porque se encuentra mal necesita una respuesta lo más rápida posible".
Pero esa respuesta llega tarde y en muchos casos ni llega. Y es que según estemos en una Comunidad Autónoma u otra, las listas de espera superan los 6 meses.
Un informe del Defensor del Pueblo detalla lo difícil que es conocer de forma exacta cuál es la demora real en las diferentes Comunidades Autónomas: sólo diez hicieron llegar datos a la institución y, además, de forma heterogénea.
Entre las que menos tiempo hacen esperar a sus pacientes se encuentra Asturias, con 26 días de media. Alrededor de dos meses es lo que tienen que esperar los pacientes en Aragón, Baleares, Cantabria o La Rioja. En la Región de Murcia, los pacientes en edad adulta esperan una media de 71 días para la primera consulta y 43 días entre la primera y la segunda cita.
Falta de psicólogos en la Seguridad Social
En España, según datos del Instituto Nacional de Estadística, el número de psicólogos colegiados aproximadamente en España asciende a 32.516. Pero sólo una pequeña parte trabaja en la Sanidad Pública.
La falta de profesionales en psicología hace que sea el médico de cabecera quien atienda problemas de ansiedad o depresión. ¿Y todavía nos alertamos de los datos tan preocupantes que existen de suicidios en España al año?
Si puedes pagarlo, puedes tratarlo
Lo que está claro es que para tratar temas de salud mental con total garantías y sin listas de esperas, se debe acudir a profesionales de la Sanidad Privada. Pero hay muchas personas en situación de vulnerabilidad económica con enfermedades importantes que no se pueden permitir "este lujo".
Y es por ese motivo que muchas personas llevan años arrastrando depresiones. Y lo peor es que esas depresiones pueden desembocar en suicidios. Por lo tanto, si no te costeas tú un psicólogo, te aseguro que estás perdido.
Datos ofrecidos por la Organización Mundial de la Salud
En España, 1 de cada 4 personas tiene o tendrá algún problema de salud mental a lo largo de su vida.
EL 6,7% de la población de España está afectada por la ansiedad, exactamente la misma cifra de personas con depresión. En ambas es más del doble en mujeres (9,2%) que en hombres (4%).
Entre el 2,5 y el 3% de la población adulta tiene un trastorno mental grave. Esto supone más de un millón de personas.
7,3 millones, casi la mitad de los y las jóvenes españoles de entre 15 y 29 años (48,9%) considera que ha tenido algún problema de salud mental.
Más de la mitad de las personas con trastorno mental que necesitan tratamiento no lo reciben, y un porcentaje significativo no recibe el adecuado.
Sin duda, cifras espeluznantes que sólo hacen crecer día tras día y año tras año.
Conclusión
De todo lo anterior podemos extraer que la salud mental en la Sanidad Pública sigue estando a la cola; listas de esperas interminables, síntomas y enfermedades que se agudizan y la injusticia de las personas más desfavorecidas que no pueden acceder a un psicólogo porque no tienen poder adquisitivo.
Estando a finales del 2022 y sigamos con estos problemas, que según las cifras arrojan, no van a cambiar. Al contrario, siguen subiendo de forma alarmante.
¿Tan difícil es crear un Plan de Salud Mental que se cumpla de verdad en las Comunidades Autónomas? ¿Tan difícil es pensar en personas que verdaderamente tienen importantes problemas psicológicos? ¿Hay que llegar al suicidio para que las autoridades se pongan las pilas en esta materia?
No olvidemos que el acceso a la salud mental es un derecho que tenemos todos los españoles. Y que debemos solicitar cuando nos encontremos mal. Y para eso, deben darnos la seguridad que cuando pidamos ayuda, de forma inmediata se nos va a dar.
¡Se necesitan soluciones ya! Tenemos que exigir el acceso inmediato a profesionales que nos ayuden. A ver si de una vez por todas los responsables entienden que tienen entre manos vidas humanas, y no objetos de usar y tirar.
Más respeto por las personas y por las enfermedades mentales.