La idea de emplear el VIH en la lucha contra el cáncer se le vino a la cabeza a Kotler después de descubrir con su colega que la proteína Vif, que se encuentra en el virus de la inmunodeficiencia humana, impide la recuperación de las células cancerígenas dañadas por la radioterapia.
En la mayoría de los casos, las altas dosis de irradiación propician la destrucción del ADN de las células cáncerosas: pierden la capacidad de dividirse y mueren. Sin embargo, en algunos casos, las células consiguen reparar el ADN y se vuelven resistentes a la radiación. A estos casos “sin esperanza” puede ayudar la proteína Vif, que desempeña un papel importante en la replicación del virus del VIH. Recomiendo leer el articulo (el consumo de cafe prolonga la vida).