¡Buen comienzo de semana a todo el mundo! siendo ya lunes, toca retomar nuestra labor diaria como redactores, lo cuál significa volver a nuestro ritmo de artículos diarios sobre el tema que más nos gusta, la tecnología. Por desgracia, en el mundo de la tecnología, no todo lo que ocurre ni todas las noticias son buenas, y con mi primer artículo de este lunes, tenéis una prueba de ello. Para ir poniéndoos en antecedentes, os diré que hoy, la cosa va sobre la polémica de Android y sus actualizaciones, tema que da más quebraderos de cabeza que alegrías.
Además, la mala noticia, va orientada a los usuarios de un terminal en cuestión, aunque el asunto, debería quedar solucionado muy en breves por lo que se comenta en la red de redes. Aún así, la noticia, como veréis, sigue sin ser plato de gusto para los usuarios del terminal smartphone protagonista en cuestión, entre los que, en cierta forma a mi pesar, me incluyo. Ahora que conocéis de qué va a tratar este post, os dejo con los detalles a lo largo de los dos próximos párrafos. Para el siguiente artículo, nada de más noticias malas
Como dice ya el título del presente artículo, en esta ocasión, toca hablar del Samsung Galaxy S3 y Android Jelly Bean 4.3. Para ponerse un poco en antecedentes, de cara a los que no tengáis el modelo de smartphone citado, comentaré de forma breve que, los usuarios del terminal Galaxy S3, llevamos meses esperando que viese de una vez la luz Android Jelly Bean 4.3 para nuestro dispositivo, y hasta hace poco, no ha habido más que atraso tras atraso, como ya he comentado en alguna ocasión, alegándose lo complejo que resulta adaptar las nuevas versiones Android a la capa de personalización TouchWiz de la compañía Samsung.
La cuestión es que la semana pasada, y en función de las operadoras, algunos usuarios de Samsung Galaxy S3, al fin comenzaron a recibir la actualización a Jelly Bean 4.3. Sin embargo, la alegría ha durado poco, y es que muchos de ellos, han señalizado fallos y anomalías desde que aplicaron dicha actualización en su terminal. Todo eso, ha tenido consecuencias, y la cantidad de quejas, ha llevado a Samsung a paralizar el proceso de actualización vía OTA en este terminal concreto, previsiblemente hasta que hayan logrado asegurarse de pulir el trabajo que han realizado.
Entre los problemas que se han encontrado, están el reinicio constante del terminal o el lag en los gráficos, sobre todo en la pantalla de desbloqueo del terminal. Como veis, son fallos lo suficientemente serios como para suponer un lastre en el uso nuevo del terminal. Ahora, sólo toca esperar a que el fallo quede subsanado lo antes posible y se reanuden las actualizaciones a Jelly Bean 4.3 vía OTA para el Samsung Galaxy S3.
Como conclusión, diré que en mi opinión no han sabido dosificar bien su ritmo de trabajo con este terminal, y han hecho las cosas corriendo a última hora ante la impaciencia de los usuarios. Eso, para mi, ha sido un error, y son pequeños detalles que ensucian su imagen. También me hace pensar en por qué son tan obstinados con su capa de personalización TouchWiz si tantos quebraderos de cabeza da, aunque esto último a lo mejor ya es indiferente viendo el movimiento que se plantean con Tizen como alternativa a Android.