Pero los que de verdad me enamoraron según entré a la tienda son esas preciosidades flúor que combinan detalles dorados con transparencias, ¡preciosísimos! Y cuando vi el bolso a juego casi me caigo para atrás. Eso que dicen que esta temporada que no se lleva el flúor, ¡yo creo que podemos alargar la tendencia un poco más!
Los bolsos nos los estuvieron enseñando por dentro y todos parecían de materiales de primera, con doble forro y un ganchillo para colgar las llaves. Además todos eran bastante grandes, ¡como a mi me gustan! Lo malo era que pesaban un pelín, supongo que por el tamaño y los apliques.