En las últimas décadas, numerosos estudios han alertado de los altos niveles de mercurio que están presentes en algunos pescados y de los riesgos para la salud que podría acarrear su consumo continuado. Trastornos en el desarrollo, problemas en el embarazo, más riesgo de cáncer... la lista de enfermedades que podrían estar relacionadas con el metal pesado es larga, aunque no exenta de polémica, ya que, en muchos casos, estaba pendiente una última confirmación científica. Esta semana, un trabajo publicado en la revista 'The New England Journal of Medicine' parece descartar una de las complicaciones más sugeridas: la enfermedad de corazón. Según sus datos, que se basan en el seguimiento de 51.529 hombres y 121.700 mujeres, "no existe evidencia de que la exposición al mercurio provoque efectos adversos sobre la enfermedad coronaria, el ictus u otros problemas cardiovasculares". "Nuestros hallazgos sugieren que la gente no debe preocuparse por su salud cardiovascular cuando decida si tomar o no pescado", comentan los autores de este trabajo, de la Universidad de Harvard, quienes, pese a todo, recuerdan que "estos datos no deben reducir los esfuerzos por reducir la exposición al mercurio, ya que puede tener otros efectos dañinos". Además, insisten en que, su investigación no debe cambiar las guías que recomiendan a las mujeres embarazadas no abusar del consumo de ciertas especies –como el atún rojo o el pez espada-, que pueden contener cantidades considerables del metal pesado. Se muestra de la misma opinión Lluís Serra, presidente de la Academia Española de Ciencias de Nutrición y Ciencias de la Alimentación, que recuerda que "lo más recomendable es variar el tipo de pescado que se consume para minimizar al máximo los riesgos". Este especialista recuerda que, generalmente, es en las especies más grandes donde se encuentra más cantidad del metal ya que éste se acumula a través de la cadena alimentaria. Con todo, subraya que la exposición al mercurio que se produce a través del consumo de este tipo de alimentos no es muy alta y que "numerosos estudios han demostrado que los beneficios de comer pescado superan con creces sus posibles riesgos".
**Publicado en "El Mundo"