Los fabricantes comerciales de comida para mascotas pueden ser buenos en ocultar la verdad acerca de sus productos. Así que te presentamos los 10 mejores secretos que no quieren que sepas.
Los dueños de los perros se esfuerzan por conocer la importancia de la nutrición saludable para sus compañeros. Están aprendiendo cómo buscar alimentos de mayor calidad para sus mascotas, evitando los ingredientes no deseados y leyendo las etiquetas. Sin embargo, todavía hay algunas cosas acerca de la industria de alimentos comerciales para mascotas de las que pueden no ser conscientes, cosas que pueden afectar la calidad de la comida que con la que alimentan a su mejor amigo, sin ni siquiera darse cuenta.
Secreto #1: La comida seca de baja calidad por sí sola no es una comida “natural” para los perros.
Los perros son esencialmente carnívoros, y sus sistemas han sido diseñados por la naturaleza para digerir comidas húmedas carnosas en forma de presas. Las croquetas de baja calidad son secas y duras, y se componen de piezas de nutrientes concentrados muy densamente con una gran cantidad de grano (maíz, trigo, etc) y otros rellenos. Por definición, no es “natural” que los carnívoros coman alimentos secos no hidratados. Y seamos sinceros: ¿a ti te gustaría comer únicamente comida seca y dura toda la vida?
Secreto #2: Los mejores alimentos secos son los que tienen más y mejor proteína procedente de carne de calidad y el más bajo porcentaje de hidratos de carbono. Las etiquetas de alimentos para mascotas comerciales, sin embargo, no darán esta información.
Un alimento seco deseable es aquel que la proteína animal constituye más de la mitad de sus calorías. Si a esto añades un bajo porcentaje de calorías de los carbohidratos procedentes de los productos de grano y otros materiales de origen vegetal tendrás una comida seca totalmente decente. Sin embargo, sólo es obligatorio que las etiquetas de comida para mascotas indiquen lo que se llama un “análisis garantizado”, especificando sólo el porcentaje de proteína, independientemente de la fuente. Por ello, una comida para perros “alta en proteínas” puede tener poco o nada de carne, si contiene ingredientes como el arroz, el maíz o el trigo, que proporcionan la mayor parte de la proteína. El porcentaje de carbohidratos en la comida no es obligatorio en las etiquetas. Así que, a menos que prestes mucha atención y aprendas a “leer entre líneas” en las etiquetas de comida para mascotas, podrías estar comprando un alimento con una cantidad elevada de hidratos de carbono procedentes del grano y muy poca proteína de carne.
Secreto #3: Las etiquetas de comida para mascotas no son de mucha ayuda en la identificación de “grasas buenas”.
La comida para mascotas con grasas como el aceite de girasol, el aceite de cártamo y la grasa de pollo dan a tu perro una piel más sana y un pelaje más hermoso que la comida a base de grasa animal genérica o sebo vacuno. Los importantes ácidos grasos Omega-3, por su parte, se encuentran en el aceite de pescado, la chía, las algas, el krill, el cáñamo y otras fuentes. Pero los fabricantes de alimentos para mascotas sólo están obligados a declarar el porcentaje total de grasa, no los componentes de ácidos grasos. Eso significa que los alimentos con grasas de baja calidad son aprobados por la ley. La buena noticia es que la comida para mascotas de primera calidad que incluyen una o más de estas grasas beneficiosas tienden a anunciarlo, ya que sus fabricantes quieren que se sepa que están haciendo un buen producto.
Secreto #4: El precio de la comida seca de alta calidad vale la pena, pero obtendrás el máximo provecho de ella si la hidratas y la combinas con comida húmeda.
Poner agua al lado de la comida seca no es hidratarla. Algunos perros casi no mastican las croquetas, así que cuando se comen un plato de comida seca y luego se beben un gran cuenco de agua, se crea una gran masa de comida seca “predigerida” en su estómago. Probablemente hayas visto a tu perro vomitar cerca de una hora después de comer, y las croquetas se ven casi igual que antes de comérselas. Ésto significa que no han sido digeridas bien. Las croquetas a base de carne de alta calidad pueden ser hidratadas para una mayor digestibilidad y son una base ideal para una comida húmeda mixta que incluya carnes frescas y pequeñas cantidades de verduras.
Secreto #5: Los porcentajes de humedad en los alimentos enlatados de gama baja son en su mayoría sólo agua, y eso es una forma cara de dar una hidratación extra a tu perro.
Millones de personas han recurrido a mezclar intuitivamente los alimentos enlatados con comida seca como una manera de dar a su perro una comida húmeda, y puede ser una gran opción para muchos. Sin embargo, los porcentajes de humedad del 78% o 80% en las etiquetas de comida enlatada de gama baja para mascotas es sólo una manera disimulada de decir “mucha agua”. Para conseguir comida que aporte más humedad de ingredientes de carne, es necesario para comprar alimentos enlatados de alta calidad. De lo contrario, es sólo una manera innecesariamente costosa de darle una hidratación extra a tu perro. Otra forma de aumentar la humedad es recurrir a las salsas naturales hechas por algunas compañías premium de alimentos para mascotas – éstas hacen a las comidas basadas en croquetas más nutritivas y más sabrosas.
Secreto #6: El hecho de que una comida seca para mascotas sea “libre de grano” no significa que sea baja en carbohidratos y alta en carne.
“Libre de grano” es el mayor reclamo en el negocio de la comida para mascotas. A primera vista, parece un enfoque inteligente. Pero así como la industria de alimentos para mascotas ha logrado vendernos alimentos bajos en carne para mascotas con grasas de menor calidad gracias al poder de la marca, el marketing y la publicidad, el “relleno” alternativo de hidratos de carbono como guisantes han creado una categoría de alimentos para mascotas libres de grano que no cumplen con la promesa de una verdadera “croqueta de carne”. Si una comida no tiene grano, pero está cargada de hidratos de carbono, aún así no es un gran alimento y debe ser juzgada en conjunto, teniendo en cuenta todos sus ingredientes. Una verdadera comida seca libre de grano reducida en carbohidratos debe tener al menos un 30% de proteínas. Pero asegúrate de que en la etiqueta puedes reconocer los ingredientes de carne que aportan esas proteínas.
Secreto #7: Ver que la carne aparece en primer lugar en una etiqueta de comida seca para mascotas no garantiza que sea realmente basada en carne.
Las etiquetas de los alimentos para mascotas listan sus ingredientes en orden decreciente de peso antes de ser procesados, no tal como existen en el producto final. Por ejemplo, para procesar una libra de pollo entero fresco en una mezcla de croquetas secas, debe ser “cocinado” desde su estado natural hasta que se queda aproximadamente en una séptima parte de su peso original. Si un ingrediente de carne fresca como el pollo aparece en primer lugar en una etiqueta de comida seca para mascotas, el siguiente ingrediente debería ser algo como harina de pollo, harina de cordero, harina de ternera o cualquier fuente de proteína de carne seca concentrada. De lo contrario, probablemente no es un verdadero alimento para mascotas a base de carne.
Secreto #8: La comida para mascotas “etapa de la vida y estilo de vida” es sólo el resultado de un movimiento estratégico para vender más.
Una manera de lograr más cuota de mercado por parte de los fabricantes de comida para mascotas es mediante la creación de alimentos “a medida” que llenan unas necesidades muy específicas para determinados animales. Nos asaltan con el mensaje de que necesitamos alimentos diferentes para cada edad, tamaño, nivel de actividad, estilo de vida e incluso raza. Pero los perros salvajes sólo se alimentan de dos cosas durante toda su vida: la leche materna por un corto tiempo, y después de sus presas. Los perros jóvenes comen como adultos y las madres jóvenes comen como machos mayores.
El “fraccionamiento” de la comida para perros en etapas de la vida se produjo porque la comida para perros a base de grano y baja en carne no satisfacía las necesidades nutricionales de los cachorros o las madres embarazadas o en lactancia. Si toda la comida para perros estuviera basada en carne de alta calidad, estas distinciones no serían necesarias. Elige un buen alimento que soporte todas las etapas de la vida y cambia sólo si no te gustan los resultados. Está bien cambiar la comida para introducir más variedad de alimentos en la dieta de tu perro, pero no es necesario cambiar automáticamente sólo porque tu mascota cumple años.
Secreto #9: Las vísceras y otros alimentos “no convencionales” son muy nutritivos, pero debes conocer sus países de origen y cómo han sido procesados.
El hígado, el corazón, el riñón, el páncreas, las tripas y otras vísceras tienden a ser mucho más nutritivas que las carnes magras musculares. Son ricas en proteínas de origen animal, y contienen muchas vitaminas naturales A y B, minerales y taurina. Las golosinas hechas de hígado, corazón y pulmones pueden ser muy saludables, y son preferible a un “snack” o galleta alta en carbohidratos. Los tejidos conectivos naturales, como la tráquea y los tendones, pueden tener una consistencia casi tan dura como el hueso, por lo que masticarlos proporciona al perro una limpieza de dientes y es beneficioso para sus encías.
Las golosinas húmedas y blandas, sin embargo, están normalmente cargadas de conservantes como propilenglicol (también usado en anticongelantes), sorbato de potasio y diversas formas de glicerina. La glicerina no es un ingrediente existente de manera natural, sino que es un producto residual “recuperado” de la fabricación de jabón o de la destilación de combustibles de etanol. Pero como procede de materia vegetal, los fabricantes pueden etiquetarlo como “glicerina vegetal”.
Secreto #10: Tanto si tienes perros como si tienes gatos, tus elecciones de comida deben incluir siempre comida húmeda enlatada.
Los gatos no beben mucha agua, y se encuentran en alto riesgo de sufrir problemas del tracto urinario, tales como obstrucciones e infecciones, si no comen alimentos completamente hidratados y “enjuagan” sus sistemas con regularidad. Dales de comer comida húmeda enlatada de alta calidad.