Segunda parte de "El blog de la Doctora Jomeini"

Por Drajomeini @DoctoraJomeini

Gracias a Estrellasdelana por la magnífica ilustración
 Os dejo aquí el primer capítulo de la segunda parte de "El blog de la Doctora Jomeini". En él, Jomeini y ElReydelpollofrito inician su convivencia y empiezan a preparar su boda, pero alguien - masculino - se cruza en medio. Y es que los R pequeños son, a veces, peligrosos. J sigue de cabeza con Empanadebonito, que está más empanado que nunca. Y La Castafiore ataca sin piedad. Por ahora, el libro está esbozado, con huecos en medio. Por eso, hoy os pido ayuda. ¿Qué os gustaría que pasara? Serena, Chiara, PerritoApaleado y Miss Vogue reclaman vuestra ayuda.
Planes de boda  En realidad, ésta no va a ser mi primera boda. Ya me casé una vez. A los ocho años, con mi amiga Lula. Ella iba de novia, con un disfraz de Cenicienta. Y yo de novio, con una chaqueta de mi padre sobre una camiseta y unos shorts. Ella iba preciosa. Yo parecía Patas Locas Crane. Pero, a pesar de esa experiencia en mi haber, cuando ElRey y yo empezamos a hablar de que habría que organizar la boda, no contamos para nada con la que se nos venía encima. Cándidamente, expusimos a nuestras familias que queríamos una ceremonia tranquila, sencilla e íntima en Tenerife. A ser posible, en una playa. La Castafiore puso el grito en el cielo:  - Pero...¿qué me estáis contando? No sólo os casáis en el culo del mundo - tanto le da que lo que ella llama "el culo del mundo" sea la tierra que me vio nacer - sino que ENCIMA no puedo invitar a mis amigas. Tenemos que organizar algo de lo que se hable. “¿Tenemos? Pero...vamos a ver...¿acaso usted se va a casar?” - pienso yo, pero ella sigue diciendo - Buscar un sitio, flores, menú, música... Me empiezan a dar los siete males. ElRey me observa de reojo y viéndoselas venir, la corta: - Bueno, bueno, aún queda tiempo ¿no te parece, mamá? Y a nosotros nos gustaría hacerlo a nuestra forma. - Querrás decir a su forma - me señala, despechada. Empezamos mal. Mi madre tampoco se quedó calladita - ¿Cómo no vas a invitar a la tía Eduvigis? - me pregunta, rayando en la histeria maternal. - Por Dios, mamá, - respondí yo - una vez, me crucé con la tía Eduvigis por la calle, la saludé y se cambió de acera como diciendo: "¿Quién será esta loca?" - ¿Y al tío Augusto? - ¿A quién? - indago, alucinada de que me salga tanta parentela de repente. - Al tío Augusto, ya sabes. - No, mamá, no tengo ni idea de quién cuernos es el tal tío Augusto. Como supongo que el tío Augusto tampoco tendrá ni idea de quién soy yo.  - Bueno, bueno -tercia ElRey, como siempre conciliador - Queda tiempo. Tal vez podemos hacer una lista conjunta. Así que, cada una por su lado, se ha puesto a organizar nuestra boda. No pasa un día sin que me llame una u otra para preguntarme: - Oye, Jomeini, que he estado pensando en...qué te parece si... Estoy pensando seriamente si Las Vegas estará demasiado lejos para un viajecito de un fin de semana.