El estudio, publicado por la Sociedad Estadounidense de Cáncer, siguió a 123 mil 216 personas durante un periodo de 14 años. Los investigadores concluyeron que las mujeres que aseguraron pasar sentadas más de seis horas diarias tenían un 37% más de probabilidades de morir. En el caso de los hombres sedentarios el riesgo de mortalidad era un 18%. Esos porcentajes permanecieron prácticamente sin cambios una vez incorporado el nivel de actividad física. El sentarse, dice el estudio, suprime a las hormonas que regulan la producción de triglicéridos y colesterol, lo que a su vez puede desencadenar problemas cardíacos. El sentarse durante periodos prolongados tiene un impacto sobre la salud y acorta la vida incluso si uno es activo. Independientemente de si uno está en una oficina o en un sofá, el sentarse durante largos periodos es peligroso. El informe hace hincapié en que los individuos sedentarios se levanten de su silla en la oficina o en casa con frecuencia y caminen aunque solo sea un rato.