Sentirse el creador de la propia vida

Por Arcoirisdan
                                                                                                                                                      EL CAMINO, ALIMENTO DE NUESTRO DESTINO
   El camino no sólo existe para llegar a nuestro destino, en nuestro andar en él vamos recogiendo los frutos que nuestra meta espera como alimento
                 
                                                                   
                                        LA DANZA DE LAS REALIDADES 

      
Todo lo que vivimos es real, si nos parece lo contrario es porque unas realidades engloban a otras y todas se están nutriendo de experiencias entre sí


                     EL MIMETISMO DE NUESTRAS CREACIONES


     Siempre hemos sido creadores de nuestra vida, pero sólo podemos sentirlo cuando nuestras creaciones son diferentes a las del colectivo de nuestra sociedad, si no es así quedan camufladas por puro mimetismo.
(En la foto una escena de la película "En busca de la felicidad")

                                        DAR VIDA A NUESTRAS CREACIONES 

     Nuestras creaciones cobran vida en el mismo acto de su entrega al mundo, por eso ofreciéndolas aumenta nuestra riqueza

        

       
                                   
                                     
                                              ENCARNAR LA VIDA 

       En el colegio, en la universidad, en la televisión ... nos han explicado lo que es la vida a través de miradas científico-culturales, ahora, podemos ir mucho más lejos y descubrirla por nosotros mismos ... asombrarnos ... y encarnarla de verdad. 
                        




LAS NECESIDADES DEL PASADO OCULTAN NUESTROS SUEÑOS 

   Para caminar hacia nuestros sueños tenemos que cortar las ataduras de nuestro pasado, las necesidades que nos imponemos, de esta manera nos será posible reconocerlos sobre un horizonte limpio, despejado y luminoso.





                                      
                               NACER A TI MISMO   
      Cuando el ego, el cuerpo, el caminar, la mirada … se conectan al corazón y la vida se convierte en una danza al son de su música, entonces naces a ti mismo. … y allí por donde pasas se convierte en un florecer…                           
             

 LAS MANOS,  ALAS DE LA CREATIVIDAD     Las manos son creatividad hecha materia, son símbolo de nuestro poder creador y una invitación constante a hacer realidad nuestros sueños, son el espejo perfecto en el que podemos reconocerlos; por eso al mirarlas desde el corazón nos sentimos libres …



        LA FAMILIA, UNA PISTA DE DESPEGUE …
    La familia puede ser una casa a la que quedamos atados de por vida o un árbol en el que iniciar un ascenso para ir ganando perspectiva y, finalmente, desde el que lanzarnos a volar nuestra propia vida. Sólo los padres que confían verdaderamente en sus hijos están dispuestos a darles el empujón que les haga enfrentarse a su libertad, al gran reto de descubrirse como seres únicos y creadores de su propia vida, más allá de las creencias familiares y culturales      
  

      

       
                   LA MÚSICA DE NUESTRA PRESENCIA 
   Cuando nuestras palabras, nuestras miradas, nuestros gestos … nacen en el corazón,  su música les impregna anunciando a todo el mundo nuestra presencia, nuestro concierto de vida … 
  
  CERRAR LOS OJOS PARA RESCATAR NUESTROS TESOROS
   Cuando cerramos los ojos en busca de nuestra luz es como contemplar el firmamento. Si lo limpiamos de nubes, los pensamientos, el negro fondo nos habla de un espacio infinito, de un territorio sin límites por explorar …  a medida que acostumbramos la mirada, la oscuridad se va llenando de estrellas, de promesas de nuevos y ricos mundos …  Basta tomar el sentir como nave para que la aventura comience…    En la exploración de este universo interior nos sorprende encontrarnos con enormes tesoros que llevan nuestro nombre: nuestros sueños. Están esperándonos para que los tomemos, abramos nuestros ojos y los entreguemos al mundo exterior, ¡la  forma más maravillosa de sentirnos los creadores de nuestra vida! Si todos nos apuntamos a esta aventura crearemos una humanidad más allá de las necesidades, en la que toda persona se sienta realizada, algo nunca visto con los ojos abiertos.  
                                   EL JUEGO DE LAS CREENCIAS 
    Jugar a ser mayores es una estrategia de la sabiduría de las edades para que el niño vaya conociendo y aceptando las reglas y creencias de su cultura. Consideramos a una persona como “madura” cuando deja de jugar a encarnar esas reglas y creencias y se convierte en su prisionero; confundiendo la verdad con el “terreno de juego”   Para escapar de estas  cárceles y vivirse como el creador de la propia vida es necesario volver a sentir que todo es un juego, haciendo uso de nuestra sabiduría de la niñez, a la que podemos sumar nuestra experiencia de adultos.