Por Psic. Raquel Ribes * Ayuda Psicológica en Línea - Psicólogos por Internet
Cuando el hombre se mira mucho a sí mismo, llega a no saber cuál es su cara y cuál es su careta (Pío Baroja)
Estoy segura de que alguna vez has escuchado frases como “este mundo no está hecho para las personas buenas” o “en este mundo si eres bueno te comen”, dando la impresión de que si eres una persona amable, bondadosa y respetuosa te toman por débil o ignorante, dándoles espacio a las personas tóxicas para aprovecharse de ti… Pero nada más lejos de la realidad…
Actuar con bondad no es sinónimo de ser frágil, y la solución no es ponerse a la altura de las personas tóxicas actuando con malicia y prestándonos de una actitud que no nos corresponde, sino saber diferenciar entre actuar con bondad y actuar exclusivamente para los demás. En esta última terminas convirtiéndote en un esclavo de la manipulación.
¿Os suenan frases como: “He aprendido a ponerme una coraza”, “Cuando estoy con la gente me pongo una careta”, “me muestro como me gustaría ser pero no soy realmente así”?
Muchas de las personas que han pasado por malas experiencias con otra persona, se vuelven desconfiadas, malpensadas, vengativas, controladoras y crean una máscara para poder enfrentarse a la sociedad. Una careta que termina por formar parte de nuestra vida y que la condiciona, porque la gente termina por ver una faceta nuestra que no nos corresponde.
Es por ello que aquí os dejo algunas de las conductas y actitudes que funcionan o no funcionan a la hora de
construir buenas relaciones.
NO FUNCIONAN:
- Pretender gustar a todo el mundo.
- Actuar de forma impulsiva.
- Pensar que los demás deberían actuar como nosotros lo hacemos.
- Pensar continuamente en lo que es justo y lo que no sin hacer nada por remediarlo.
- Entrar en conflicto con otra persona por opiniones diferentes.
- Hacer ver que no te duele una situación en la que lo estás pasando mal.
- Decir “Sí” a todo.
- Obligarse a actuar o decir cosas que no se sienten realmente.
- Preocuparse por lo que pueden estar pensando los demás de nosotros.
- Desconfiar de todo el mundo hasta que se demuestre lo contrario.
FUNCIONAN:
- Expresar con respeto tu opinión siempre que tengas la oportunidad.
- Dar ejemplo con nuestra conducta.
- Pensar en las consecuencias.
- Tomar conciencia de lo que podemos hacer y lo que no.
- Pensar que uno mismo puede marcar la diferencia.
- Reflexionar con otras personas, contarles cómo te sientes, buscar ayuda.
- Aprender a decir “NO”.
- Aprender a diferenciar entre “debo” y “quiero”.
- Abrirse a conocer a la gente sin prejuzgar.
- Saber alejarse a tiempo de las personas que no nos convienen.
Parece que se está asociando ser una persona fuerte, valiente y segura con ser una persona egoísta, y ser una persona bondadosa con ser frágil. Confundir estos términos puede acarrear que crezcas como una persona tóxica, y que las relaciones que formemos se basen en la manipulación, la inseguridad y el engaño.
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