Esas especias tienen en realidad propiedades de tipo farmacológico que nos ayudan a manejar el azúcar de los dulces.
El doctor Anderson, del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, descubrió que hay diversas especias que estimulan la actividad de la insulina, lo cual significa que le ayudan al organismo a procesar la insulina con mayor eficiencia, reduciendo la demanda.
El doctor Anderson realizó experimentos en tubos de ensayo para medir la actividad de la insulina en presencia de ciertos alimentos.
Aunque la mayoría de ellos no produjeron efecto alguno, hubo tres especias y una hierba que triplicaron la actividad insulínica: la canela, los clavos, la cúrcuma y el laurel. La más potente fue la canela. Recomiendo leer el articulo (la cebolla, enemigo de la diabetes)
Un poco de canela, como la cantidad que se le pone a una tostada, es suficiente para estimular la actividad de la insulina.
Una pizca de canela para aliñar distintos alimentos ayuda a mantener la glucemia bajo control.
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