La propuesta, es una especie de laberinto, con estructuras de anillo, cada poca distancia para hacer que la sección del pabellón varíe. Todo está cubierto, por varias capas de plático especial -EFTE- que les ha permitido jugar con las diferentes opacidades, colores, texturas e incluso efecto "espejo".El visitante, completa su experiencia de disfrute metiéndose en el interior, en cuyo espacio central se ha dejado un vacío para albergar eventos y un café.
Feliz comienzo de semana! yo pongo rumbo a Levante, pero el blog sigue su curso de publicaciones, y por supuesto os espero en las redes sociales. Os contaré mis aventuras en el FIB, a partir del jueves!!
Mil besosMónica t.
***fuente: dezeen.com