La buena noticia es que a la inversa (en la pérdida de peso) también sucede lo mismo. Según un estudio llevado a cabo en California (1), aquellos pacientes que se sometían a tratamientos de la obesidad además de perder peso, influían de algún modo en la pérdida de peso de los familiares que vivían en el mismo domicilio.
.... así que puestos a hacer dieta y a adoptar un cambio de hábitos alimenticios..¿Por qué no plantearlo como un reto familiar en el que todos los miembros de la familia estén implicados?(1): Estudio llevado a cabo en la Universidad de Standford California (EEUU).
Fuente: http://www.elmundo.es/elmundosalud/2011/10/17/nutricion/1318873075.html