En Murcia, el ayuntamiento ha optado por asumir el coste íntegro de la prestación. Cuenta con 3.000 usuarios en la actualidad.
En Gijón la teleasistencia es un servicio público municipal que se presta en condiciones de absoluta gratuidad para sus usuarios por medio de la denominada Fundación Municipal de Servicios Sociales.
En Palma de Mallorca se ofrece de forma gratuita a todos los usuarios que tengan pensiones o un salario inferior al salario mínimo interprofesional.
En Bilbao se necesita llevar tres años empadronado en alguno de los municipios de Vizcaya y los usuarios aportan según sus ingresos.
En Alicante, el ayuntamiento reclama como propia la competencia de servicio, los usuarios pagan según sus ingresos aunque excluyen a los que ingresen más del 175 % del salario mínimo interprofesional.
En Zaragoza no existe la gratuidad del servicio, los usuarios realizan un copago en función de sus ingresos.
Valladolid, presta el servicio de teleasistencia desde hace escasos años y se encuentra en fase de consolidación.
Y por último en Vigo, el servicio de teleasistencia sigue en el aire y en pleno debate y no se sabe cuál será el futuro inmediato del servicio.