Y mira que yo intento venir motivada. Pero no hay manera....la perspectiva de la tarde me puede. Lo ¿mejor? es cuando resulta que te propones dedicarte a actividades que no precisen mucha rumba neuronal, más que nada porque no tienes el cuerpo para ello, y llega tu compañero el itinerante.
a) chistes........y yo no soy muy de chistes la verdad....y claro intento disimular y como medio sonreir.. por quedar bien más que nada.
b) sucesos de la jornada: a ver quién reprime un bostezo ante su relato sin levantar sospechas, que se me saltan las lágrimas y todo de contenerlo.
-Por qué lloras?
-Por nada por nada, es que se me ha metido un pelo en la lentilla.
c)consulta sobre un tema que "supuestamente" dominas: y ahora qué hago? momento dramático cuando decide preguntarme sobre algo que debería saber...pero si no recuerdo ni cómo me llamo en estos momentos!
Logro salvar los obstáculos, se va a su cubículo y empieza a silbar....creo que estoy teniendo una crisis...
Sabéis cuánto puede caerme por asesinato no premeditado pero deseado de compañero de trabajo?
Tengo que hablar con expertos e ir elaborando un plan de fuga por si las moscas....
Love and kisses,
Fani