¿Puede ser una casualidad? No lo creo, pues precisamente llegué a este blog y a encontrar ese plagio gracias a que el propio administrador comentó una reseña de este blog, marcó como favorito uno de mis Twitts y me sigue en Twitter, con lo cuál, demasiada casualidad sería. Si nada más abrir tu propio blog literario comienzas plagiando ideas, ¿hasta qué punto puedes llegar con el paso del tiempo? ¿Es esta la manera más correcta de comenzar? Una de las cosas que más valoro, ya sea en un blog, literario o de otra índole, en un libro, película,... es la originalidad y la esencia de la persona que dicho recurso crea, pues creo que es esa la base de todo y el punto fuerte de las personas que este tipo de proyectos con tanta ilusión comienzan.
En mi opinión esto es algo a lo que darle vueltas, reflexionar y pensar, pues simplemente tenéis que poneros en mi situación para observar cómo me siento, y apuesto a que varios de los que este post leeréis habréis sido víctimas de plagios, pues no es la primera vez que a mí me ocurre, y apuesto a que a vosotros tampoco. No con este post pretendo crear una revolución, ni nada parecido, sino simplemente exponer mi caso y que, ojalá, la persona a la que me refiero con todo esto reflexione y entre un poco en razón, pues para mí es algo muy importante ese nombre y lo que ello conlleva. Para mí es muy importante conocer vuestra opinión con respecto de mi situación y del tema en general, así que contadme.
¿Qué opináis de este tema? ¿Cómo os sentiríais vosotros si fuerais víctimas de un plagio similar?